América regresó a casa con rostros serios y de molestia. Conscientes de que enfrentarán una misión que parece imposible."Obviamente que estamos golpeados pero tenemos que levantarnos, todavía esto no se acaba, faltan noventa minutos y trataremos de hacer lo imposible. Ayer revisaba el partido y revisaba el partido, tanta mala suerte no pudimos tener, todo se conjugó en un partido", dijo el técnico Miguel Herrera en su llegada a la Ciudad de México.Será clave manejar la presión y la ansiedad por encontrar un gol en los primeros minutos."Entregarnos a muerte, no hay presión. En la vida ¿quién dijo que esto era fácil?, si fuera fácil me siento en un escritorio a rascarme la panza. Aquí la presión es diario", sentenció el estratega azulcrema.Las Águilas salieron del aeropuerto y se fueron a entrenar a puerta cerrada. Para el domingo ya podrán contar con Emanuel Aguilera.