En el arranque de la jornada 6 de la Eliminatoria rumbo a Rusia 2018 en Concacaf, México vino de atrás para, ante un Estadio Azteca pletórico, rescatar un empate a 1 gol ante Estados Unidos, en una edición más de este pasional partido.Más allá de los contextos anímicos y físicos, hubo factores clave ocurridos meramente en la grama del Coloso de Santa Úrsula que potencializaron el que ni verdes ni norteamericanos pudieran salir con la mano en alto de su batalla.En este texto te presentamos los 5 apuntes tácticos que arrojó el choque de estrategias entre Juan Carlos Osorio, y la Selección Mexicana, y Bruce Arena, con su revitalizado equipo de las Barras y las Estrellas. Revive el empate entre México y Estados Unidos AQUÍ. 1 ) La posesión del balón. México tuvo un aplastante 73 por ciento de la tenencia de la bola ante Estados Unidos, quien apostó por un repliegue muy bajo, materializado en un esquema de 5-4-1, que en ocasiones se convertía en un 6-3-1, cuando Beasley bajaba a perseguir al extremo derecho en turno del Tri.Esto obligó a los verdes a circular la pelota en los bordes y las bandas del área norteamericana, pero sin tanto acceso claro a zona de definición. De hecho, el único tiro mexicano que fue a portería terminó en gol. Para la cantidad de tiempo que se tuvo el balón el solo haber podido sumar 10 disparos habla de lo compacto del aglutinamiento defensivo de Estados Unidos.
Los 5 apuntes: México 1-1 Estados Unidos
Descubre los puntos que influyeron para que la Selección Mexicana y Estados Unidos hayan dividido puntos en duelo del Hexagonal Final rumbo a Rusia 2018 en el Azteca
2 ) El respeto de Osorio por el ataque exterior de los americanosEl estratega colombiano inició el partido con una línea de 4 defensores. Normalmente sus laterales tienen proyección ofensiva; no obstante, la lectura del técnico nacional para este partido fue distinta: mandó al campo a 2 centrales habilitados como laterales, Carlos Salcedo, que se alternaba la posición con Diego Reyes, otro marcador, por derecha, y Oswaldo Alanís por izquierda.La predicción de Osorio era que Estados Unidos explotaría la velocidad Arriola y Pulisic por las bandas, con metros por delante, debido a su clara tendencia de regalar la iniciativa del partido para obtener espacios propicios para contragolpear.Sin embargo, muy poco del ataque estadounidense se gestó por carriles exteriores. Incluso, el único gol del equipo de Bruce Arena llegó con un tiro de larga distancia y el otro de sus 2 disparos a puerta se dio tras una jugada a balón parado.Evidentemente, el apostar por proteger sus flancos privó al equipo mexicano de contar con más elementos al ataque por las bandas.
3 ) El juego asociativo de Chicharito Javier Hernández es reconocido por su certificado instinto goleador. Un finalizador de estirpe, en palabras de Juan Carlos Osorio. Sin embargo, cuando los contextos de un partido no le ofrecen la posibilidad de recibir pases a la espalda de los defensores, aprovechando su velocidad en el desmarque de ruptura, o un surtido constante de balones al área, sufre.Con el repliegue tan bajo de Estados Unidos, " Chicharito" se veía obligado a dejar el área para poder tener contacto con la pelota. Pero su poca efectividad en el juego de espalda al marco, su asociación, terminó por aislarlo en la inoperancia.Para este tipo de escenarios, la mejor técnica, visión y pase de Raúl Jiménez y Oribe Peralta hubiesen, quizá, ayudado a México a organizar mejor sus ataques por el centro del campo, un espacio que salvo los intentos de Carlos Vela, poco se aprovechó.
4 ) Inoperancia por las bandasLa Selección Mexicana se decantó por proponer duelos individuales por los costados como medio de ataque a Estados Unidos. Los extremos que se posicionaron sobre las bandas fueron Carlos Vela e Hirving Lozano, inicialmente, más Javier Aquino, en el complemento.Con los laterales "amarrados", por ser más marcadores que ofensores, no había oportunidad de tener superioridad numérica por los costados. Juan Carlos Osorio intentó ofrecerla con su primer cambio, apenas a los 31 minutos: el ingreso de Jesús Gallardo por Oswaldo Alanís.El jugador de Pumas ocupo, en potencia, la lateral izquierda, pero terminó por ser un extremo más. A pesar de la intención del técnico nacional, esta variante no pudo redituar en el marcador. Y es que los mano a mano, los duelos individuales, fueron poco propuestos por los ya mencionados atacantes de banda, y, cuando lo hicieron, los perdieron en su mayoría.Aunado a lo anterior, está el hecho de que las veces que se logró superar a un rival, los centros enviados al área fueron escalofriantemente defectuosos: solo 1, de Jesús Gallardo, terminó siendo recibido por un atacante verde. Hubo otros 2 exitosos, pero surgidos de los botines de Diego Reyes y Marco Fabián.
5 ) Las jugadas a balón parado, sin éxitoEn lo que va del Hexagonal Final, México ha marcado 4 de sus 9 goles en jugadas con pelota detenida, en forma de remates de cabeza. Un arma, sin duda, bien potencializada por el trabajo de cancha de Osorio.No obstante, el poderío físico de los defensores de Estados Unidos nulificó la fuerza área del Tri, que constó de 10 intentos: 9 en tiro de esquina y 1 más de tiro libre.