A finales de enero, tras su inesperada aparición en Royal Rumble, Ronda Rousey comentó que formar parte de la WWE le permitiría "estar en una situación donde puedo disfrutar el evento en lugar de disfrutar el resultado". Un mes después, la exestrella de UFC ponía la firma sobre el contrato de la empresa de lucha libre más grande y espectacular del planeta.
Ronda Rousey y su debut en la WWE: de patadas y codazos a pleitos de guion
Wrestlemania 34 marcó el inicio de una nueva etapa en la vida profesional de la exyudoca olímpica. Ronda Rousey cambió el peligro de los golpes por un espectáculo que exige al espectador la suspensión de su incredulidad.
Anoche, en el Superdome Mercedes Benz de Nueva Orleans, Ronda tuvo un debut de ensueño en Wrestlemania 34, el evento más importante del año para la WWE, al vencer a Stephanie McMahon, quien a partir de ahora se perfila para ser la archirrival de 'Rowdy', como lo dictan los guiones.
La nueva etapa de Ronda Rousey en la industria del entretenimiento, en su más estricto sentido, exigirá a los fanáticos que la siguieron del octágono al cuadrilátero la 'suspensión de la incredulidad'. A diferencia de UFC, la WWE lo tiene todo planeado: diálogos, rivalidades, hermandades, arengas, alianzas, traiciones.
Lo que verán aquellos que no están acostumbrados a este tipo de shows tendrán que ceder y creer en cada uno de los elementos que darán vida al nuevo personaje de Ronda Rousey; la expeleadora de MMA tampoco estará exenta de esta transición.
Arriba del ring no existe Holly Holm ni Amanda Nunes, sino una baraja de personajes que son más 'actores' que atletas y que jamás pondrán en peligro sus vidas con una sumisión o una patada a la sien.
¿Acaso la carrera de Ronda Rousey pasó de la seriedad a la burla? ¿Huyó, como muchos aseguran, de una vida más cruel a una más fácil? No. Ni su legado quedará opacado por la WWE, ni tampoco se acobardó. 'Rowdy' supo hacer lo que muchos atletas profesionales no quieren o pueden por temor o simple terquedad: retirarse a tiempo de un deporte tan complejo como peligroso.
La irrupción de Ronda en el espectáculo de la WWE significa que la exolímpica podrá, en efecto, disfrutar el evento, los diálogos acartonados, las luces, la pirotecnia, pero también la sincera ovación de una peculiar comunidad de fanáticos que acogió con los brazos abiertos a la pionera de la jaula.