El boxeador mexicano Saúl 'Canelo' Álvarez calificó a Gennady Golovkin como un "hipócrita" mientras su guerra de palabras aumenta antes de la revancha del próximo mes en Las Vegas.
'Canelo' llama "hipócrita" a Golovkin en escalada guerra verbal
Saúl Álvarez no cree que GGG pueda considerarse como un boxeador con estilo mexicano.
Golovkin y Álvarez se subirán al ring en e l T-Mobile Arena el 15 de septiembre, un año después de que su tan esperado primer encuentro terminara en un controvertido empate.
Una revancha planeada en mayo se canceló cuando Álvarez falló en marzo un control antidopaje.
La hostilidad entre los dos bandos se ha mantenido a fuego lento desde entonces, y este domingo ambos intercambiaron golpes corporales y verbales en comentarios a los periodistas en un entrenamiento abierto frente a los fanáticos en el Banc of California Stadium de Los Ángeles.
Álvarez, de 28 años, dijo que la mala sangre entre ambos hacía poco probable que alguna vez formara una amistad con Golovkin una vez que terminara la pelea.
"Para mí eso sería muy difícil. Todas las cosas que se han dicho. Para mí, personalmente, es muy difícil dejar la puerta abierta", añadió.
Álvarez también se abstuvo cuando se le pidió que comentara sobre la afirmación frecuente de Golovkin de que su estilo agresivo característico lo había hecho popular entre los fanáticos mexicanos del boxeo.
"Es un hipócrita. Quizás lo use para atraer fanáticos. Si algo trágico ocurriera en México, él no estaría allí".
Álvarez, quien peleó caprichosamente en la primera pelea hace 12 meses, que la mayoría de los neutrales creen que Golovkin debería haber ganado, también rechazó las sugerencias de que su oponente tenía un estilo de boxeo más "mexicano".
"Ha habido muchos peleadores de México que tienen estilos diferentes. Mi estilo es el mío, soy mexicano. No sabe lo que me queda por mostrar", agregó.
El entrenador Eddy Reynoso también se metió en el alboroto verbal, diciendo que Golovkin, de 36 años, tenía poco margen de mejora.
"A los 36 años de edad no hay nada más que puedan enseñarle a este tipo. Pero le han enseñado a callar".
Mientras tanto, Golovkin acusó a Álvarez de faltarle el respeto al boxeo por su fallida prueba antidopaje al clembuterol, que el campamento mexicano atribuyó a carne contaminada.
"En este momento me siento un poco diferente. No es solo deporte, no solo negocios. Su equipo no respeta a las personas del boxeo. Toda esta situación fue terrible", sentenció.