Son muchas las frases célebres que los luchadores de cualquier índole pueden acabar por comerse. No todos, pero ser fanfarrón, agresivo y montar un show en la rueda de prensa previa a la pelea garantiza varios miles de ventas más en el pago por visión. El irlandés Conor Anthony McGregor es experto en esto. Pronunció esta frase tras ganar su revancha contra Nate Díaz: “ Sorpresa, sorpresa, el rey ha vuelto”, intentando desmontar la que Díaz pronunció tras derrotar al púgil irlandés el 5 de marzo de 2016 por sumisión en la ronda dos: “ Yo no estoy sorprendido”. Bueno, en realidad, la respuesta correcta acabó con un sonoro motherfuckers. Resumiendo: “ Yo no estoy sorprendido, hijos de puta”.
Conor MacGregor: “Sorpresa, sorpresa, el rey ha vuelto”
Se enfrentan dos reyes del PPV. Algunos podrán considerarla una farsa deportiva, pero nadie puede negar que el show está garantizado.
McGregor tenía la frase de la revancha marcada, grabada y aprendida y por suerte para él la pudo pronunciar. Eso sí, por decisión unánime, no por sumisión ni KO… Luego en la mente de muchos aficionados a la UFC van 1 a 1 y se espera una pronta revancha. Recordemos, además, que MacGregor y Nate Díaz ostentan el record de compras de una pelea de la UFC 100 con más de 1,6 millones de ventas.
Pero antes de esto, MacGregor ha decidido hacerse millonario. Retó a Mayweather, retirado, y éste se dejó querer, dicen, apremiado por las deudas de sus desmesurados gastos y porque vio unos 90 millones de dólares fáciles. Casi ni tenía que hacerse el duro, ya que el marketing lo hizo el irlandés. Y aunque deportivamente se trate de una pelea a todas luces desigual, la expectación alrededor de ella no deja a nadie indiferente, ya sea para criticar, admirar o simplemente opinar. Eso sí, todos los que hablan, y muchos más, la verán. Cosa que hará a MacGregor entrar en las ligas mayores de la recaudación, ya que su futuro rival “está considerado el rey de PPV. Lleva vendidas más de 19 millones de cajas por un valor de más de 1.000 millones de dólares y forma parte de los tres eventos con más ventas; su enfrentamiento con Oscar de la Hoya con 2,4 millones de ventas, el combate ante el mexicano Saúl "el canelo" Álvarez con 2,2 millones de ventas y el más reciente con Manny Pacquiao que generó un total de 5 millones de ventas”, según Wikipedia.
Deportivamente la pelea se decanta del lado del Floyd Mayweather. El norteamericano no conoce la derrota y su experiencia en un ring de boxeo debería hacer el resto a pesar de sus 40 años y haberse retirado en 2015. MacGregor, por su parte, su mejor disciplina es el Boxeo pero sus movimientos en el cuadrilátero se asemejan más con otras artes marciales. Un derechazo de Floyd le mandaría a la lona muy pronto y, presumiblemente, el americano empezará con un ritmo terrorífico para acabar con lo que muchos consideran una farsa, darles la razón y, de paso, llevarse una caja que gastar en las excentricidades que guste.
El negocio y el deporte se decantan en esta balanza claramente del lado del negocio. Eso sí, queda la esperanza de que el irlandés le imponga la primera derrota al americano (49-1 sería) o que MacGregor salga derrotado (50-0, bonito número para Mayweather) y no le quede más remedio que regresar a la UFC para hacer caja contra Nate Díaz (1-1) y retirarse, esta vez de verdad, con la suficiente caja como para pagar todos los gastos y más de su reciente paternidad. Desde luego, un paso crucial en la carrera y ex carrera de todos los implicados. Eso sí, puede que esta vez el rey que vuelva sea Floyd Joy Mayweather Jr.