Óscar De la Hoya, fundador de Golden Boy Promotions, ha declarado con frecuencia que uno de sus mayores pesares como boxeador profesional es no haber tenido una revancha contra Félix Trinidad. De la Hoya sufrió su primera derrota profesional ante Trinidad en septiembre de 1999, pero el resultado de aquella pelea que representaba la unificación del título wélter fue ampliamente debatido.
De la Hoya: No podía dejar pasar la revancha entre 'Canelo' y Golovkin
El 'Golden Boy' prometió que no volvería a comenter el error de privar al mundo del boxeo de un segundo episodio entre el kazajo y el mexicano como le pasó ante 'Tito' Trinidad.
Trinidad, que también estaba invicto en ese momento, venció a De la Hoya por decisión mayoritaria. Dos jueces, Jerry Roth (115-113) y Bob Logist (115-114), le dieron la victoria a Trinidad y un juez, Glen Hamada, dio un empate (114-114). La pelea entre De la Hoya y Trinidad generó aproximadamente 1.4 millones de compras en pago por evento, récord para un combate de boxeo fuera de la categoría de los pesos completos. El dinero y el peso fueron los dos problemas que principalmente impidieron una revancha inmediata.
De la Hoya no sólo habría tenido la oportunidad de vengar su controversial derrota ante Trinidad, también habría hecho otra enorme suma de dinero por el combate de revancha. Todos querían otra pelea entre el puertorriqueño y el mexicano-estadounidense, pero Trinidad finalmente subió a peso mediano y fue fuertemente castigado por Bernard Hopkins en su pelea de septiembre de 2001 en el Madison Square Garden. Todo lo anterior llevó a De la Hoya a saber que no quería que le quedaran arrepentimientos similares sobre Canelo Álvarez y Gennady Golovkin.
"Hay peleas en el pasado, por ejemplo, Trinidad y De la Hoya, ojalá esa pelea hubiera tenido lugar por segunda vez", dijo el 'Golden Boy', por lo que prometió nunca cometer un error similar como promotor de boxeo.
Sería un riesgo potencialmente costoso si no se lleva a cabo una revancha entre Canelo y Golovkin, que ahora está programada para el 15 de septiembre en Las Vegas, Nevada. El boxeador mexicano (49-1-2, 34 KOs), quien está representado por Golden Boy Promotions, propiedad de Óscar de la Hoya, tuvo un empate controversial con Golovkin (38-0-1, 34 KOs) el 16 de septiembre en el T-Mobile Arena de Las Vegas.
La superestrella sufrió una suspensión de seis meses por dar positivo en más de una prueba de clembuterol en febrero de este año, lo que provocó la cancelación de la revancha donde estaría en juego el campeonato de peso mediano que originalmente estaba programada para el 5 de mayo en la T-Mobile Arena.
"De hecho, usé mi propio dinero para cerrar la brecha y hacer que esta pelea suceda", dijo Óscar. "Merecemos la revancha de Canelo-Golovkin. La primera pelea fue genial. C reo que la segunda pelea será aún mejor. Ambos tipos no se quieren, realmente se odian y creo que lo veremos ese 15 de septiembre, así que esta pelea será una superproducción. No hay dudas al respecto", sentenció De la Hoya.