El boxeo, el escape de las drogas y las pandillas para Andy Ruiz

Andy Ruiz peleará este sábado en Arabia Saudita ante Anthony Joshua, los reflectores del mundo están sobre el mexicano y lo que pueda hacer sobre el ring para retener sus cetros.

Lo que la gente desconoce es que para llegar a ese punto de su vida debió pasar por una dura infancia en Imperial, California; una ciudad fronteriza en la que el tráfico de drogas y las pandillas son ‘el pan de todos los días’.

“Todo el mundo es rudo en ese lugar porque es una pequeña ciudad cerca de la frontera mexicana”, señala Andy Ruiz.

A los 6 años su padre, albañil de profesión, enseñó a su hijo el oficio y decidió enfocarlo hacia el boxeo, algo que le ayudó a desarrollar su fuerza, pero en las calles era complicado canalizar esa energía ya que pelear era una constante.

“Hay mucho contrabando de drogas, hay pandillas, cárteles; pero, por suerte, el box me salvó la vida. Me mantuvo disciplinado, me alejó de las calles”, añade Ruiz.

Fue gracias a la persistencia de sus padres que Ruiz no desvió el camino, aunque no pudo evitar la prisión, algo que recordó este año cuando visitó a los internos del entonces existente penal de Topo Chico. “Yo también estaba en las malas, pero cambié, creyendo en mí y en Dios me cambió la vida. Fue un rato, pero no es nad abonito ”.

Hoy, Ruiz es ejemplo de superación e incluso el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha hecho un llamado para que el pugilista ayude a encaminar a los jóvenes con un mensaje en contra de la drogadicción.

“Aprovecho para invitar al Canelo y necesito que nos ayuden. También a Andy mi tocayo. Me van a ayudar y todos los que quieran mandar mensajes a los jóvenes para alejarlos de esto.Es veneno”, declaró en conferencia el mandatario.

Ruiz defiende este 7 de diciembre sus cetros de la AMB, OMB y FIB, es el primer campeón mexicano de peso completo en la historia y su leyenda pude seguir creciendo si vuelve a salir triunfante ante Joshua. Por el momento su historia quedará registrada como una de las más memorables en el mundo del deporte y representa a la vez una esperanza para aquellos que piensan que su vida nunca cambiará.