El mexicano Jaime Munguía tuvo un debut con el pie derecho en la categoría de los pesos medios al superar por la vía del nocaut al irlandés Gary O’Sullivan, en pleito efectuado en el Alamodome, de San Antonio, Texas. El castigo constante por parte del púgil tijuanense pagó dividendos a los 2:17 del undécimo asalto, cuando la esquina a del irlandés 'tiró la toalla' para poner fin a la pelea.
Jaime Munguía debuta con éxito en los pesos medios y noquea
El boxeador tijuanense derrotó a Gary O'Sullivan en el undécimo round por la vía del nocaut.
Munguía, de 23 años, dejó vacante su cinturón mundial peso Superwelter, en busca de ir por los grandes peleadores de las 160 libras, una división que incluye a su compatriota Saúl 'Canelo' Álvarez, Gennady Golovkin y Demetrius Andrade, entre otros.
Como monarca en la división de las 154 libras, Munguía realizó cinco defensas del cinto de la Organización Mundial de Boxeo ante Liam Smith, Takeshi Inoue, Denis Hogan, y en septiembre pasado frente a Patrick Allotey.
El desarrollo de la pelea en San Antonio
Munguía soltó varios jabs aunque en contadas ocasiones logró conectar de manera consecutiva, mientras que 'Spike' contestaba del mismo modo, pero era el mexicano quien lograba dejar que se resbalaran los golpes. Y en el round de estudio, Jaime comenzó a mostrar la extensión de brazos suficiente para alejarse de los puños de su rival.
Los golpes de Munguía atizaron en el cuerpo del irlandés, en particular, en el segundo asalto, pero el retador ripostó con un gancho al mexicano, quien con poco movimiento de cadera, no pudo eludirlo, aunque sin consecuencias. Al final entró un derechazo del irlandés que sonó en todo el Alamodome.
En el tercer round el mexicano tratando de mover los brazos para tirar su eficaz jab, pero Munguía mostró más velocidad, aunque no tanta precisión en esta parte inicial de la contienda. El de Tijuana conecta, pero también recibe, mientras que irlandés se quejó de un golpe bajo, aunque al final, el daño se lo llevó Jaime.
En el cuarto episodio, Jaime salió a dar más combinaciones, buscando sacarse la espina en cuanto a cómo terminó el tercer asalto, incluso pudo plantarse para recetarle un sólido uppercut que cimbró a 'Spike'.
Para el quinto round Munguía empieza a perder un poco la concentración al ser advertido por el árbitro para que no pegue abajo del cinturón. No ayudó que el de Tijuana recibió un impacto de derecha que provocó que se cubriera y no soltara golpes. Al final en el intercambio, ambos se llevaron fuerte castio, aunque fue O'Sullivan el más afectado, gracias a que un jab, un volado y un gancho le entraron francos.
Munguía vuelve a enfocarse en el combate y eso trae dividendos. Con sendo derechazo,estuvo cerca de derribar a 'Spike', quien de manera asombrosa, valiente, mantuvo la vertical. El irlandés se queja por un golpe bajo, se agacha y se va a su esquina. Le dicen que se tome su tiempo. En la repetición se ve que le da abajo del cinturón y le quitan un punto al mexicano, pero fue un round trabado, áspero.
Fue en el séptimo asalto cuando el bajacaliforniano hizo sentir al irlandés el poder de sus puños, con combinaciones y volados de derecha que impactaron el rostro de un 'Spike' que incluso en este lapso se doblegó ante un golpe al abdomen que quiso que el réferi validara como golpe bajo, pero la campana salvó al retador quien extenuado fue a sentarse a su esquina de cara al octavo round.
En el octavo round, Munguía le bajó las revoluciones al combate y a la intensidad, dando un poco de respiro a O'Sullivan, quien al margen de navegar hacia el noveno capítulo, no podía ocultar ya el desgaste, la fatiga y el castigo en el rostro por parte del nativo de Tijuana.
Aprovechándose de su mayor estatura, el mexicano trató de mantener a raya al irlandés quien por momentos trató de sorprender al mexicano pero éste le espetó una combinación de izquierdazos que lo cimbraron, lo tambalearon y lo dejaron con las piernas danzantes. Pero sobrevivió para pasar al décimo asalto.
Luego de un adagio, es decir, de una tensa calma los primeros dos minutos del décimo round, Munguía explotó con dos sólidas combinaciones en búsqueda del nocaut, pero como buen irlandés, reacio, aferrado y con mucho orgullo, O'Sullivan trataba de mantenerse en pie, con más cuota heroica que con compostura, pero transitó al undécimo.
Cerca del minuto final del round 11 Munguía se convirtió en una máquina de soltar golpes y aunque apostando al nocaut descuidando la guardia propia, corría ese riesgo a sabiendas que el rival estaba ya sin gas, sin piernas y sin stamina. Segundos después, víctima del castigo de los puños del mexicano y del agotamiento, el irlandés cayó y el joven púgil tijuanense levantó los puños porque se concretó el triunfo, el nocaut y la retención de su cetro.