Martha Salazar no solo es boxeadora, también juega basquetbol, ayuda a los niños a alejarse de vicios, es camionera y campeona de peso completo WBC.
Por:
TUDN
Imagen Alma Montiel/WBC
CANCÚN - Martha Salazar no solo es boxeadora, también juega basquetbol, ayuda a los niños a alejarse de vicios, es camionera y campeona de peso completo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), título que confía defender.
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“The Shadow”, nacida en Ocotlán, Jalisco, dejó México a los nueve años de edad para ir a Estados Unidos; estuvo en Tijuana el pasado mes de enero, se concretó la pelea titular con Alejandra Jiménez y ahora está en Cancún, lista para exponerlo.
“Siempre entreno al 110 por ciento, no peleo seguido porque no hay muchas boxeadoras de peso completo, pero siempre estoy lista para lo que venga. Ya peleé con las mejores, Alejandra es la número cinco del mundo y estamos listas para hacer buen show”, comentó.
Pero el deporte de los puños no es todo en su vida, pues no le da para vivir como ella quisiera y debe realizar otra actividad para generar ingresos. Es camionera, labor que desempeña entre 40 y 50 horas a la semana.
“Soy trailera, agarré mi licencia apenas hace seis meses, viajes de aquí a allá. Cuando tengo pelea le digo a la patrona para que me dé permiso”, dijo la pugilista, quien radica en San Francisco, California.
Los viajes que realiza son relativamente cercanos, trayectos de dos días, uno de ida y otro de regreso y lo disfruta, “la manejada está bonita, es por la costa”, dijo Salazar, quien afirmó que la práctica del boxeo es solo por placer.
“No lo hago por dinero, es el amor del deporte, me enamoré hace como 20 años del deporte, empecé con kick boxing, después un entrenador me enseñó cómo boxear y me dijo que me fuera al profesional, me enamoré del deporte y aquí estoy”, comentó.
También tiene tiempo para otras actividades, pues ”cuando no boxeo juego basquetbol, entreno niños, entreno a mi sobrina que quiere ser boxeadora, está en amateur, ayudo a niños con problemas, pero siempre atenta por si me sale una pelea”.
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Aunque no sabe en qué momento pondrá fin a su carrera como boxeadora, a sus 46 años de edad se siente plena y dispuesta a seguir en el cuadrilátero, feliz porque ya cumplió sus sueños, uno de ellos conquistar el cinturón verde y oro.
“Esto es lo único por lo que peleé siempre, lo busqué muchas veces y no lo pude agarrar, me retiré seis años, regresé porque había mejores mujeres en la división, esta pelea es una extra, ya cumplí todo lo que quería, si después sale otra veré cómo me siento y si la agarro o no”, comentó.
Feliz de estar en el país donde nació y de presentarse ante “la raza”, agradecida con el apoyo que le han mostrado los fans, dijo “me encanta el boxeo, si pudiera vivir del boxeo creo que bajaría de peso para más peleas, pero debo trabajar para mantenerme”.
