El mundo parece sorprendido con la pelea que sostendrán Floyd Mayweather Jr. en contra de Conor McGregor, para muchos el combate imposible entre un boxeador y un artemarcialista, sin embargo, no es la primera vez que dos exponentes de distintas disciplinas se miden en un ‘pleito’.
Video Mayweather y McGregor sacaron chispas en el 'face to face'
El MGM Grand fue testigo del primer 'cara a cara' de la semana entre ambos peleadores, de cara al combate que sostendrán el próximo sábado en la T-Mobile Arena.
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En 1976 la vieja generación vio a uno de los más grades boxeadores de todos los tiempos subirse a un ring para medirse a un luchador… Muhammad Ali era el campeón mundial de los pesos completos, tenía 34 años, idolatrado y con un estilo único que logró hacer ver mal a Joe Fraizer o a George Foreman. En la cumbre , Ali no tuvo empacho en enfrentarse a los mejores, incluso si se trataba de otro deporte; aceptó el reto de un peleador japonés que en la época era igualmente idolatrado en su país, Antonio Inoki.
Si bien Ali era un excelente boxeador, igualmente insolente, conocedor de sus grandes cualidades, durante una visita a Japón declaró que era el mejor, pero además lanzó este reto: “¿No hay algún peleador oriental que quiera desafiarme? Le daré un millón de dólares si gana”.
Sus palabras fueron escuchados por Inoki que no sólo aceptó el reto; para que Ali se animara, junto a su equipo, le dieron al pugilista $6 millones de dólares para que cerrara el combate, en ese entonces era una cifra exorbitante a la que difícilmente un deportista podría resistirse.
En un principio se pretendió que se tratara de un tema coreográfico en el que Ali perdiera, pero el orgullo de Cassius Marcellus Clay era demasiado grande para perder, en tanto, Inoki deseaba que el combate fuera verdadero... la pelea se volvió legitima y ambos subieron a un ring.
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Antes de la pelea existió, tal como ahora, un circo mediático de declaraciones, Ali llamó al luchador “Pelicano” por su prominente quijada y esté respondió afirmando que le rompería un brazo.
El combate se realizó el 26 de marzo de 1976 en el Nippon Budokan de Tokio, la pelea fue extraña pues no se respetaron las reglas del boxeo. Inoki era luchador pero era un especialista en Judo, las regla no eran claras, aunque se especula que existieron amenazas de muerte al luchador en caso de que llevara la pelea al suelo.
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En entrevista exclusiva para Univision Deportes, el luchador irlandés aseguró que intentará acabar el combate frente a Mayweather con un golpe en la cabeza, y que ha disfrutado mucho en su preparación.
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En realidad el combate fue muy malo, el luchador se dedicó a golpear las piernas y Ali gritaba que era un “cobarde” por no usar los puños, en realidad no tenía muchos argumentos ante las patadas que recibía, corría y usaba el ring pero logró conectarlo en pocas ocasiones. Fueron 15 asaltos en los que jamás se enfrascaron en un toma y daca, solo existieron destellos impactos. Al final los jueces decretaron que el pleito terminaba en empate.
El 26 de agosto se vivirá una versión moderna, en las que ahora las ventajas son para Mayweather, reglas de boxeo ante un combatiente de artes marciales mixtas limitado a los puños. En un combate todo puede pasar y siempre existen cuestiones impredecibles. Pero no se sorprendan… no hay nada nuevo bajo la luz del sol.
