La pelea entre Anaguchi y Tsutsumi fue una de las batallas más duras que se vieron en el 2023 e incluso fue catalogada por muchos como la pelea del año.
Kazuki mostró un corazón sorprendente en el combate ya que se fue a lona en cuatro ocasiones para levantarse y seguir peleando, lamentablemente comenzó a convulsionar y debió ser atendido para irse al vestuario.
Kazuki fue trasladado a un hospital donde peleaba por su vida tras ser sometido a una cirugía de craneotomía de emergencia por un hematoma provocado en la pelea.