El Sevilla cayó derrotado por 0-1 en el Sánchez Pizjuán ante el Athletic Club en la vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey, pero el 1-3 logrado hace una semana en San Mamés le valió para pasar a cuartos de final.
En modo automático Sevilla se deshace del Athletic de Bilbao en Copa del Rey
Los andaluces se repusieron de la derrota liguera que los vascos les propinaron y aprovecharon su ventaja de la ida en San Mamés.
El conjunto andaluz, pese a una buena renta, no quiso especular con el resultado y metió velocidad al partido ante un rival que, como era lógico, también buscó la meta local, en esta ocasión defendida por Juan Soriano.
El delantero vasco Gorka Guruzeta fue el primero que se puso de gol en el partido al cuarto de hora de juego en un pase en profundidad que no supo resolver.
Pese a ello, Guruzeta volvió a gozar de otra ocasión en la recta final del primer período, pero el partido se fue al descanso con el empate a cero inicial.
Tras la reanudación fue Munir del Sevilla el que, en el primer minuto, pudo sorprender al Unai Simón, pero el balón se le fue al lateral de la red.
Con este intercambio de golpes el partido fue avanzado sin que ninguno de los dos equipos supieran acertar con la portería contraria, lo que derivó a favor del Sevilla y en contra de una remontada del Athletic.
Guruzeta, en el minuto 76 y de un gran cabezazo, sí logró marcar y ello enrabietó a los suyos en busca de la proeza pero debía marcar dos tantos más y no los consiguió.
De este modo la escuadra de Pablo Machín sigue con vida buscando un título copero que el año pasado se les escapó en la final al perder con el FC Barcelona.