El Super Bowl LIII es un enigma. Las preguntas que los amantes de la NFL se hacen por estos días son ¿quiénes serán los dos que lleguen al Gran Partido? ¿Otra vez los Pats? ¿los Super Rams? Incógnitas que se resolverán el domingo, pero algo es seguro... habrá espectáculo garantizado.
Decreto del Super Bowl LIII: La edición más espectacular de la historia... ¡garantizado!
Todavía no se conocen los equipos que jugarán el 3 de febrero en Atlanta por el Vince Lombardi pero el Súper Domingo será un partido espléndido, bajo cualquier combinación posible.
Si bien hubo juegos defensivos notables esta campaña, este año ha sido en gran parte sobre ser muy agresivo, y atacar y atacar sin detenerse hasta poner números grandes en el marcador. Incluso los Playoffs no vieron bajar el ritmo y cada vez importa más ir al frente, sin piedad.
Por primera vez en la historia, los cuatro equipos que más puntos hicieron en la temporada avanzaron a las Finales de la Conferencia de la AFC y NFC en casi medio siglo que lleva la era del Súper Tazón desde 1970.
Algo está claro, los equipos del fútbol americano profesional cada vez quieren parecerse más a la parafernalia del College y sus marcadores abultados, y dicha apuesta está rindiendo frutos.
Aún no conocemos a las dos escuadras que se impondrán en los Juegos de Campeonato por el derecho a jugar el domingo 3 de febrero en el Mercedes-Benz Stadium de Atlanta, pero tan solo de imaginarnos los cruces, cualquier combinación suena apetecible.
El Super Bowl LIII promete ser espléndido y alucinante, y aquí te detallamos porque:
CHIEFS VS. SAINTS
El #1 vs. #1. Los dos mejores equipos de la temporada y líderes absolutos de cada conferencia, frente a frente, en el partido máximo. Una tendencia en la época reciente, pues cuatro de los últimos cinco Super Bowls han sido con los dos equipos clasificados número 1. La elite de la NFL.
Un duelo entre New Orleans Saints (14-3) vs. Kansas City Chiefs (13-4) vería enfrentarse a los equipos que más partidos han ganado por conferencia y los más regulares en todo el año. Sería el cara a cara entre dos quarterbacks pistoleros que han establecido récords en la liga.
El enfrentamiento entre Patrick Mahomes y Drew Brees sería algo así como la segunda versión del Marino vs. Montana de la temporada 1984. El mariscal de segundo año con un cohete en el brazo y sus estadísticas descomunales, ante el veterano pasador que busca su segundo campeonato. Nos arrojaría una épica batalla áerea, un auténtico bombardeo en Atlanta.
También vería medirse a dos entrenadores a los que les gusta experimentar en el ataque y jugar corriendo muchos riesgos. Sean Payton contra Andy Reid. Dos cerebros ofensivos que lo mismo apuestan por una reversible, que recurren a una jugada de engaño o no titubean al momento de lanzar un desafío para retar el criterio de los oficiales como incitan a sus rivales.
PATRIOTS VS. RAMS
El cierre ideal de Tom Brady. El círculo perfecto. El emblema de New England, llamado the GOAT (el Más Grande de Todos los Tiempos), acumula 19 temporadas en la NFL pero su leyenda comenzó precisamente ganándole un Super Bowl a los Rams. Los Carneros del 2001 jugaban en St. Louis pero dominaron la Conferencia Nacional ese año con una ofensiva aplastante, ¿les suena conocido?
El Super Bowl XXXVI entre Rams y Patriots se llevó a cabo el 3 de febrero del 2002 en el Louisiana Superdome de New Orleans, donde la franquicia de Nueva Inglaterra ganó el primer campeonato de su historia. Los Pats eran liderados por un joven mariscal de campo de 24 años de edad, llamado Thomas Edward Patrick Brady, Jr. designado MVP de aquel partido.
Luego de cinco anillos de campeón, cientos de récords, disputar ocho Super Bowls, y ser el líder de la mejor dinastía en la historia de los deportes americanos, Brady tendría la posibilidad de cerrar su ciclo en la NFL dentro de un escenario similar.
Levantar el trofeo Vince Lombardi otra vez, exactamente 17 años después del primer título, jugando en un estadio de la NFC Sur, justo en la misma fecha y contra los que empezó todo: los Rams. Una oportunidad de retiro inmejorable para Brady, de buscar el sexto campeonato de los Pats, para dejar su legado poniéndolos como los más ganadores en la era del Super Bowl. Además, sería un deleite disfrutar el duelo de estilos entre McVay y Belichick. La intensidad y el descaro del coach más joven contra la sabiduría del viejo lobo de mar, un estratega experto, quizás el mejor de todos los tiempos.
CHIEFS VS. RAMS
El Super Bowl que todo mundo pedía durante gran parte de la campaña, entre los dos equipos más espectaculares que, indudablemente, arrasaron con la liga los dos primeros meses del año. Sería revivir el trauma de los aficionados en México por perderse el Juego del Año en el Azteca, que se fue a Los Ángeles en lo que acabaría siendo el Monday Night Football más increíble de la historia.
El duelo nocturno del lunes 19 de noviembre arrojó cualquier cantidad de récords. Fue una guerra de puntos que culminó en triunfo de los Rams 54-51, siendo el tercer partido con más puntos en la historia de la NFL y el MNF con mayor puntuación de todos los tiempos. Fue la primera vez que los dos equipos hicieron más de 50 puntos y que una escuadra con 51 puntos anotados pierde.
Kansas City y LA Rams son las dos mejores ofensivas del 2018, acabando como los dos equipos que más puntos hicieron en la temporada. 1° (565) y 2° (527) promediando 35.1 y 32.8 puntos por partido, respectivamente. Dos amenazas constantes con armas de sobra en el ataque: Todd Gurley lideró la liga con 21 TDs totales desde el scrimmage y tercero con 1251 yardas terrestres. Mahomes encabezó los quarterbacks lanzando 50 TDs y fue segundo en yardas con 5097; Jared Goff fue cuarto con 4688 yardas. Travis Kelce fue el segundo TE con más recepciones con 103 y líder en yardas con 1336. Tyreek Hill fue cuarto en yardas recibidas con 1479 y en TDs con 12.
Sin duda, un Chiefs contra Rams nos daría un Super Bowl fantástico y repleto de puntos, que muy probablemente impondría un nuevo récord de puntos en el ‘Juego Grande’ después de que, el año pasado, Eagles y Patriots se quedaron a solo 1 punto de empatar la marca historia de 75. La venganza de Mahomes, Hill y Watkins contra los Rams de Goff, Gurley y Peters, un platillo exquisito de revancha que muchos ya se saborean para revivir dos meses y medio después en el Mercedes-Benz Stadium.
PATRIOTS VS. SAINTS
Esta versión es la más esperada por la NFL desde hace por lo menos una década. Un partido con dos quarterbacks legendarios futuros Salón de la Fama y con un lugar privilegiado entre los mejores en haber jugado este deporte: Tom Brady vs. Drew Brees. Duelo de cabras, bueno, suena mejor en inglés, pero captaron la idea.
G.O.A.T. vs. G.O.A.T. Dos mariscales de campo de la vieja escuela, amos del emparrillado y líderes incuestionables, enfrentándose en la cúspide de sus carreras. El ‘Juego Grande’ por excelencia. El primer Super Bowl con dos quarterbacks titulares de más de 40 años de edad. Mítico. Irrepetible.
Este 2019 se reservó la oportunidad más cercada de ver el Brady contra Brees, un choque que ha venido amagando las últimas siete campañas y que está a una victoria. Dos Hall of Famers de estilos distintos pero indudablemente dos nombres a elegir a ojos cerrados para liderar un drive final de dos minutos a la hora de ganar un partido. Dos Top 5 de la historia, al menos en cifras.
Brees es el líder absoluto en la historia con 74,437 yardas y Brady lo sigue de cerca en cuarto lugar con sus 70,514. Repiten lugares en pases completos, y son tercero y segundo respectivamente en touchdowns con 517 y 520, acechando los 539 de Peyton Manning. Son los jefes en activo con más juegos ganados, Brees es 2° lugar con 163 triunfos. Brady se cuece a parte con sus 235 victorias.
Aunado al utópico duelo de pasadores que se dirigen al Olimpo, el Pats-Saints no dejaría disfrutar de dos mejores defensivas en el ‘Súper Domingo’ con figuras como los esquineros Stephon Gilmore y Marshon Lattimore y pass rushers como Trey Flowers y Cameron Jordan. Esquemas ofensivos con un juego terrestre en binomio con el Sony Michel/ James White contra Mark Ingram/ Alvin Kamara y por supuesto, el choque de genios y personalidades entre Bill Belichick y Sean Payton.
Así que, sea cual sea el Super Bowl LIII que se defina el próximo domingo por la noche, lo que es un hecho es que tendremos tela de donde cortar y un juego memorable el 3 de febrero en Atlanta. Aunque si se trata de elegir, un servidor se queda con el Chiefs vs. Saints para ver una explosión ofensiva en el majestuoso domo de Georgia.