Super Bowl

    Los Ángeles y Boston tienen su rivalidad de NBA y preparan un Clásico instantáneo de la NFL

    'Enemistados' por la mayor rivalidad en la NBA, Los Ángeles y Boston tendrán un Clásico instantáneo en la NFL a partir del Super Bowl LIII.


    Por:
    Ricardo Otero.

    Jared Goff y Tom Brady se enfrentarán por segunda vez.

    Imagen AP
    Jared Goff y Tom Brady se enfrentarán por segunda vez.

    Hay 2 mil 585 millas entre el Memorial Coliseum de Los Ángeles y el Gillette Stadium de Foxborough, la tercera distancia más larga entre dos casas de equipos de la NFL, solo superada por las brechas entre los Chargers y los propios Patriots -2 mil 588- y entre los Dolphins y los Seahawks -2 mil 719-.

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    Dos regiones, el sur de California y Massachussets, que podrían ser parte de países diferentes. Una con una tremenda presencia e influencia latina y la otra como parte del origen de los Estados Unidos. Concentran a dos de las tres ciudades deportivas más importantes de Estados Unidos -Los Ángeles y Boston-, según un estudio que realizó Wallet Hub que toma en cuenta el tamaño del mercado, la pasión, número de seguidores y asistentes a los partidos.

    A través del deporte, han generado episodios que las acerca gracias a su enconada rivalidad en el baloncesto. Los Lakers y los Celtics son los equipos con más títulos de la NBA: 17 para Boston y 16 para los Lakers -los primeros cinco en Minneapolis y el resto en Los Angeles-, 10 más que los equipos que ocupan el tercer peldaño en esta lista -Bulls y Warriors-.

    Pero aunque este verano se cumplirán nueve años de la última vez que estas dos quintetas se enfrentaron en las Finales, la rivalidad deportiva se ha trasladado a la MLB y la NFL.

    En octubre pasado, los Red Sox vencieron a los Dodgers en la Serie Mundial en cinco juegos, y nunca en 115 años de este evento los equipos tuvieron que viajar tanta distancia para enfrentarse. Pudo ser una barrida que evitaron los Dodgers con su victoria en el Juego 3, en 18 entradas y más de siete horas de partido.

    Es la primera vez que hay un Super Bowl en el que se enfrenten Los Ángeles y el área de Boston, si bien es el segundo entre ambas franquicias, pues vale recordar que en febrero de 2002 los Rams eran de St. Louis. Pero a diferencia de lo que pasó en la Serie Mundial, este duelo luce más parejo, pues si bien Los Angeles terminó la temporada con mejor marca (13-3), los Patriots (11-5) y sus nueve Super Bowls en 17 años los ponen como favoritos.

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    La distribución geográfica de las divisiones de la NFL hace difícil la creación de una rivalidad entre ciudades tan lejanas y a eso le sumamos que estos equipos están en conferencias diferentes, por lo que solo pueden enfrentarse en temporada regular una vez cada cuatro años. Solo se han encontrado 12 veces, con siete victorias para los Patriots, pero hay un elemento que puede crear un Clásico instantáneo el próximo 3 de febrero en Atlanta.

    Tom Brady jugará, en efecto, su noveno Super Bowl y su presencia, junto a la del coach Bill Belichick, es sinónimo no solo de la era de mayor grandeza de la franquicia, sino también, indudablemente, de la dinastía más longeva que haya visto la NFL. Y el primero de sus anillos fue precisamente a costa de los entonces St. Louis Rams, a los que vencieron en un partido de alarido por 20-17 con un gol de campo de Adam Vinatieri en los segundos finales.

    El partido que se jugará en el Mercedes Benz Stadium podría marcar el final de la era Brady. Con 41 años de edad, es probable -más no definitivo- que este sea el último Super Bowl del quarterback más ganador de la historia, ante la misma franquicia que lo vio encumbrarse por primera vez.

    Una victoria de los Patriots sería la reafirmación de la dinastía Brady-Belichick; una victoria de los Rams, el relevo generación con el coach más joven y el segundo quarterback de menor edad, Sean McVay y Jared Goff que hayan ganado un Super Bowl.

    Los cerebros detrás de los equipos que protagonizarán el Super Bowl LIII tienen algo en común: mentalidad ganadora. Sin embargo, hay otras enormes contrastes de los cuales hablar.
    Empecemos por decir que el head coach de los New England Patriots, Bill Belichick, es el más ganador en la historia de la NFL en cuanto a Super Bowls se refiere, con cinco.
    Y por el otro lado, tenemos a Sean McVay, quien en su segunda campaña como mandamás de los LA Rams los lleva al Super Bowl. Detrás de eso, es el entrenador más joven en llegar al SB: a la edad de 33 años.
    En esta imagen, Belichick (centro), que data de 1991 nos da una idea de sus comienzos en el fútbol americano. Aunque sus inicios se remontan más atrás, tanto así como 1975 con los Baltimore Colts.
    Tras un largo andar en la NFL como entrenador asistente, en 1991 los Cleveland Browns le dieron su primera oportunidad como Head Coach, pero su marca con el equipo fue de 36-44 en cinco años.
    Por azares del destino, hubo un coqueteo con los New York Jets pero nunca logró convertirse de facto en su entrenador principal. Algo de lo que quizás se arrepintieron después en la Urbe de Hierro.
    Pero en 2000 llegó a los New England Patriots. En su primer año el récord del equipo fue de 5-11. Al año siguiente, los guió a ganar su primer Super Bowl, ante los entonces St. Louis Rams.
    En 2003 y 2004 conquistaría Super Bowls consecutivos con los Pats, derrotando en el Gran Juego a los Carolina Panters y a los Philadelphia Eagles, respectivamente, para apuntarse tres anillos.
    No fue sino hasta 10 años después que los Pats volvieron a coronarse de la mano de Belichick cuando vencieron a los Seattle Seahawks para sumar el cuarto campeonato.
    Dos años después, ante los Atlanta Falcons, sumaría su quinto campeonato, tras una remontada increíble.
    Con el triunfo en Arrowhead Stadium el fin de semana pasado, por el título de la AFC ante los Kansas City Chiefs, Belichick se apunta su novena visita al Super Bowl, un récord histórico.
    Aunque esta fotro data de 2010, cuando le dieron el trabajo como asistente de las alas cerradas de los Washington Redskins, dos años atrás tuvo un cargo similar con los Tampa Bay Buccaneers.
    McVay, debido a su intelecto y capacidad de aprender rápido, escaló peldaños en el organigrama de los Redkins y de 2014 a 2016 se encargó de ser el coordinador ofensivo de Washington.
    Y en 2017, McVay, quien jugara como receptor en el fútbol colegial con los Red Hawks de la Universidad de Miami en Ohio, se convirtió en el head coach más joven en la historia al firmar con los Rams.
    A la edad de 30 años debutó como entrenador y apenas le tomó un par de campañas transformar a los LA Rams de un equipo bueno y prometedor, llegando a Playoffs, a uno contendiente.
    Apenas ayer McVay cumplió 33 años y con esa edad llegará al Super Bowl con sus Rams haciendo historia, al ser el entrenador más joven en la historia en alcanzar ese hito.

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    Imagen Getty Images
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