De repente, los Indianapolis Colts están causando gran revuelo en la ciudad y en la NFL.
Reacción de Indianapolis en el cierre de la campaña causa revuelo rumbo a los Playoffs
De la mano de Andrew Luck, los Colts han ganado siete de sus ochos juegos más recientes, para estar metidos de lleno en la pelea por un boleto a la postemporada en la Conferencia Americana.
El domingo corrieron el balón eficientemente contra una de las mejores defensivas de la liga. Contuvieron a dos de los mejores receptores en semanas consecutivas y terminaron con la racha de nueve partidos sin derrota de Houston, así como con los cinco triunfos consecutivos de Dallas.
De ganar sus últimos dos partidos, los Colts (8-6) podrían estar de regreso en los Playoffs por primera vez en cuatro años y podrían ser un rival difícil en la postemporada.
“Absolutamente puedo sentir una diferencia importante en las últimas semanas comparado con el inicio del año”, dijo el entrenador en jefe Frank Reich, cuando se le preguntó sobre la atmósfera en la ciudad.
“No es que salga mucho porque no lo hago, pero lo poco que lo hago, el Starbucks en la mañana o donde sea un viernes por la noche para cenar con mi esposa, puedes sentir la emoción de los aficionados y es emocionante para todos nosotros en la organización. Es divertido verlo”.
No hace mucho tiempo, este equipo parecía un seguro participante en la postemporada, a la que avanzaron durante un periodo de 15 años que comenzó en 1999.
Cuando los Colts terminaron 8-8 y se perdieron los playoffs en 2015, los aficionados lo consideraron en gran parte una anomalía porque Andrew Luck se perdió nueve partidos por lesiones.
Luck regresó en 2016, pero cuando los Colts concluyeron 8-8 de nuevo y no se clasificaron, el debate cambió. Muchos se preguntaron si el equipo necesitaba un nuevo inicio y el dueño, Jim Irsay, respondió con el despido del gerente general Ryan Grigson.
Entonces, Luck se perdió todos los encuentros de la temporada anterior para recuperarse de una cirugía en su hombro de lanzar, y los Colts cayeron a una marca de 4-12. Se perdieron la postemporada por tercer año seguido y el entrenador Chuck Pagano fue destituido.
Muchas personas externas pensaron que los Colts necesitaban una renovación importante, una percepción que se vio reforzada por la decisión de Josh McDaniels de romper un acuerdo para convertirse en el nuevo entrenador en jefe de Indianapolis poco después de la derrota de los New England Patriots en el Super Bowl LII, la prolongada rehabilitación de Luck y el arranque de esta temporada con foja de 1-5.
Pero el gerente general, Chris Ballard, y Reich, la segunda opción de Indy como entrenador, han armado una combinación ganadora al mantener el rumbo. Ahora viene la parte difícil: cerrar fuerte.
Una victoria sobre los tambaleantes Giants, combinada con una derrota de Pittsburgh o Baltimore este fin de semana, daría a los Colts el control de su destino en el último duelo de la temporada, de visita ante Tennessee (8-6), un equipo ante el cual Luck jamás ha perdido como titular.
Eso es suficiente para tener a todos fuera del vestuario hablando sobre los posibles duelos de playoffs por primera vez en cuatro años.
“Estamos jugando un gran fútbol americano”, consideró el receptor T.Y. Hilton tras la más reciente victoria de los Colts. “Ahora mismo, o eres el tren o estás en las vías. En este momento, estamos rodando, así que es mejor que te subas al tren”.