Tras un año y cinco meses de investigaciones, que vincularon a autoridades e instituciones de cinco países (Colombia, Bolivia, Brasil, Estados Unidos e Inglaterra), la Aeronáutica Civil de Colombia entregó el informe final sobre el accidente aéreo de la empresa LaMia, que dejó seis heridos y 71 fallecidos, en su mayoría miembros del equipo brasileño de fútbol Chapecoense.
Aeronáutica Civil de Colombia reveló las causas de la tragedia aérea del Chapecoense
El organismo encargado de regular la aviación civil en Colombia dio a conocer las razones por las que el avión de la empresa LaMia se accidentó el 28 de mayo de 2016 en territorio colombiano.
El informe señala que entre los hechos determinantes para que se presentara el accidente aéreo está que la aeronave “tenía un déficit de 2.303 kgs de combustible, ya que para recorrer la ruta entre Santa Cruz (Bolivia) y Rionegro (Colombia), las disposiciones del sector exigían una cantidad mínima de combustible de 11.603 kgs y esta aeronave solo contaba con 9.300 kgs”.
En el comunicado también se indica que pese a que la empresa LaMia y la tripulación de la aeronave de matrícula LMI 2933 “eran conscientes de la escasa cantidad de gasolina para terminar el vuelo en Rionegro”, se abstuvieron de aterrizar en otro aeropuerto de la ruta para reabastecer de combustible el aparato y completar el recorrido sin dificultades.
Además del incumplimiento de las políticas de combustible por parte de la empresa LaMia, el escrito revela la “falta de supervisión y control operacional y ausencia de llamados oportunos (tardía declaratoria) de “prioridad” y “emergencia” por parte de la tripulación cuando era inminente que se estaba agotando el combustible, lo que ocasionó una demora en la aproximación del avión a la pista de Rionegro”.
Finalmente, el informe recuerda que “la empresa boliviana LaMia tenía deficiencias organizacionales, una difícil situación económica, inconvenientes en la dotación de cargos y problemas en su sistema de gestión de seguridad operacional y en el cumplimiento de las políticas de combustible pues, pese a que estaban establecidas en los manuales, no se cumplían en la práctica”.