El miedo por el virus, el tener la posibilidad de seguir pagando un abonado para no deslindarse del equipo de sus amores y hasta adaptarse a ya no socializar, son algunos de los problemas que sufren los fanáticos que tienen una pasión en común: el futbol en vivo y en directo.
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Francisco Garza, aficionado de Tigres de la UANL, se enteró que no habría más futbol en la antesala del partido ante Bravos de Juárez; desde entonces sólo hay ideas sueltas sobre la resolución de su abonado y sigue esperando instrucciones del club, pero está consciente de que eso no es lo más importante.
"Es muy raro porque me acuerdo de estar viendo partidos de Tigres en el Volcán en televisión abierta cuando nunca había pasado eso, y estás sentado en la sala de la casa pensando 'yo debería estar ahí'. Esto no es normal, sí te sientes extraño.
"Sí tengo ganas de ir al estadio, sí me gustaría, pero mientras las cosas sigan como están es mejor mantener nuestra distancia. No volver al estadio hasta que nos lo permita el semáforo epidemiológico. Por cuidarme a mí, a mis padres, a mi esposa, a mis suegros, a mi familia", compartió.
EL VIEJO CONTINENTE TAMBIÉN ESPERA
Los clubes en LaLiga de España, en su mayoría, ofrecieron tres opciones: devolución, donación o prioridad para la siguiente temporada.
El SevillaFC regresó aproximadamente el 30% del dinero del abono a aquellos socios que lo desearon, pero anunció que premiaría ampliamente a todos los que decidieran que ese dinero continuara en el equipo como parte de una campaña denominada 'Ahora y siempre, quédate conmigo'.
José Luis Caballero, fanático sevillista desde que tiene uso de razón, decidió renovar el abono en medio de la incertidumbre de no saber en qué momento saldrá a la venta próxima.
"(Para tomar la decisión) me basé en que económicamente tengo la suerte de poder sacándome el carnet año tras año, es verdad que es una situación delicada y el dinero a mucha gente le puede hacer falta. En mi caso que soy un aficionado bastante pasional al futbol y al equipo, no tengo ningún problema en seguir esperando que se puedan adquirir los abonos.
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"El número de socio es un número, al fin y al cabo no es lo más importante. Para mí lo más importante es la sensación de pisar el campo y ver a mi equipo. Por desgracia, estamos en una situación que tenemos que ver el futbol desde casa con la grada vacía. Ver las imágenes de la televisión sin público es muy triste, estoy impaciente por volver al campo, es una situación que no tiene palabras para describirse", reconoció.
LA PASIÓN DESBORDADA DE SUDAMÉRICA QUE FUE FRENADA
Una de las mayores aficiones de Brasil es la de Corinthians, y Felipe Kormann, miembro de la Fiel Torcida, recordó con nostalgia aquellos días de futbol que se ven lejanos. En el balompié brasileño también hubo distintas opciones como continuar pagando la membresía, resolución que tomó Felipe "para ayudar al club financieramente".
"Es complicado porque nos gusta mucho hacer presencia e ir al estadio, llevar a la familia, tomar una cerveza con los amigos en el estadio. Te quedas sin aquel momento que es lo que más se disfruta del futbol, el pre y el post juego, aquel momento de encontrarte con tus amigos y juntarte con gente que ni conoces, que finalmente es lo que hace diferencia e incrementa la pasión de estar en un estadio de futbol.
"El equipo lo ha resentido mucho, Corinthians siempre tuvo grandes resultados en el nuevo estadio desde el 2014 y este año ha sido el peor desempeño que el equipo ha tenido en casa, no sólo por la falta de aficionados porque este año la directiva no ha hecho un buen trabajo, pero creo que la falta de aficionados ha impactado directamente en el desempeño del equipo", expresó el aficionado que es parte de 'O bando de loucos'.
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