Cruzeiro, dos veces campeón de la Copa Libertadores, jugará en 2020 en la Segunda División del fútbol brasileño, cuya Liga terminó este domingo.
El histórico Cruzeiro cae a la Segunda División en Brasil
El club, dos veces campeón de la Libertadores, era uno de los cuatro equipos que no había descendido.
Con el Flamengo consagrado como campeón del Brasileirao con cuatro jornadas de anticipación y todos los cupos de la Libertadores ya decididos, la atención en la última jornada estaba centrada en la suerte del Cruzeiro, al que todo le salió al revés.
La entidad azul de Belo Horizonte era uno de los cuatro clubes de Brasil, junto a Flamengo, Santos y Sao Paulo, que nunca habían caído a la Segunda División.
Cruzeiro llegó a la última jornada entre los cuatro últimos de la clasificación, que son condenados al descenso. Esperaba que una victoria sobre el Palmeiras y una derrota del Ceará le libraría de la humillación.
Sin embargo, el conjunto azul cayó en casa por 0-2 ante el Palmeiras, mientras que el Ceará empató 1-1 en su visita al Botafogo.
Cruzeiro, cuatro veces campeón brasileño, terminó la Liga de este año en la decimoséptima posición, con 36 puntos, a 3 unidades de las conquistadas por el Ceará.
El equipo abandonará la elite juntó a Avaí, Chapecoense y CSA.
El equipo de Adilson Batista dominó el primer tiempo, pero Zé Rafael puso en ventaja al Palmeiras en el minuto 56 tras una gran jugada de Dudu y una asistencia de Raphael Veiga. Tan sólo 25 minutos después Dudú marcó el puntillazo.
El Cruzeiro, que no pudo contar hoy con cinco titulares, incluyendo el argentino Alejandro Ariel Cabral por suspensión y el creativo Thiago Neves por divergencias con la dirección, también perdió al zaguero colombiano Luis Manuel Orejuela por lesión al comienzo del segundo tiempo.
Cuando transcurría el segundo tiempo y la afición se enteró que el Ceará había empatado con Botafogo, se multiplicaron las imágenes de hinchas llorando en el estadio Mineiro o abandonando las tribunas.
Igualmente comenzaron a registrarse peleas entre hinchas y lanzamiento de sillas a la cancha. El partido terminó cinco minutos antes del fin del tiempo reglamentario.