En el partido de la jornada 24 de la Bundesliga, el Werder Bremen y el FC Nürnberg se jugaban tres puntos de oro en la pelea por alejarse del descenso pero una cosa que ninguno de los dos equipos estuvo dispuesto a sacrificar fue el Fair Play.
Jugador de Werder Bremen admitió “clavado”, pidió a árbitro no marcar penal
Aaron Hunt del Wederer Bremen se reveló como un verdadero héroe del fair play al rechazar un penal a su favor pues no había falta.
Nürnberg, que marcha en el lugar 14 apenas dos por encima del “infierno” recibía a Bremen, que lo aventajaba solo por dos puntos. Sin embargo, a pesar de lo crucial que podría resultar el juego, el japonés Hiroshi Kiyotage puso la mesa para la caballerosidad en una jugada en la que el colegiado marcó tiro de esquina para los locales. Kiyotage, haciendo gala de decencia, dijo al árbitro que de hecho él había tocado por último el balón y que debía cobrarse un saque de meta.
Las obras buenas generan obras buenas y, a finales del segundo tiempo, Aaron Hunt devolvió el favor con intereses. Hunt cayó dentro del área tras un centro raso a la a penas del lado peligroso de la media luna. El árbitro marcó el tiro desde el manchón pero Hunt, sin dudarlo por un segundo, se levantó y señaló al juez que de hecho se había tropezado con el campo y que no hubo falta de por medio. ¿Quién dijo que la caballerosidad ha muerto?
El triunfo al final fue para los de Bremen por 2-0. Con los tres puntos, el equipo del norte de Alemania se colocó en la undécima posición con 28 puntos y puso tierra entre ellos y el descenso.