La máxima del legendario entrenador argentino César Luis Menotti es que para analizar al fútbol el requisito indispensable es dejar de lado el resultado. Y es que su crítica al balompié moderno se basa en que todo está perversamente dominado por el 'resultadismo.'
Löw y Kovac: ¿en Alemania y en la Bundesliga también son resultadistas?
Por meses la prensa germana le contó los días al croata como DT del Bayern y su equipo al fin desbancó al Dortmund la misma semana que Löw anunció la exclusión de Müller, Boateng y Hummels.
Así fue que surgió la admiración por el fútbol alemán y por la Bundesliga como el lugar donde los proyectos deportivos son respetados a pesar de resultados adversos. En 100 años de historia, la selección de Alemania ha tenido solo diez directores técnicos, siendo Joachim Löw el dueño del banquillo teutón desde el 2006. "Los alemanes no son resultadistas."
No obstante, el anuncio del propio Löw sobre prescindir definitivamente de los seleccionados del Bayern Munich, Mats Hummels, Jerome Boateng y Thomas Müller fue tomado como un golpe de timón por parte de un entrenador que ya es visto como un lastre para la Mannschaft tras Rusia 2018. Piden la cabeza de Löw y Löw les dio las cabezas de Hummels, Boateng y Müller.
"Creo que es injusto que te consideren oxidado con 29 o 30 años," declaró el entrenador del Bayern, el croata Niko Kovac, en defensa de sus dirigidos. La cabeza del propio Kovac fue pedida por influyentes periodistas alemanes mientras duró el liderato del Borussia Dortmund de Lucien Favre en la Bundesliga.
Sin embargo, luego de 25 jornadas el gigante bávaro logró posicionarse en la cima de la tabla. Y lo hizo jugando de inicio con los tres futbolistas señalados por Löw. En su momento Kovac fue acusado de carecer del liderazgo para controlar los egos del vestidor muniqués, como los de Franck Ribery o el propio Müller... y de no saber cómo gestionar a los jóvenes Serge Gnabry, Joshua Kimmich y Leon Goretzka.
Nueve meses después de la peor actuación alemana en la historia de las Copas del Mundo, el fútbol teutón ha demostrado vivir tan presionado por el 'resultadismo' como los demás. Independientemente de culturas e ideologías, los resultados mandan actualmente y, si las inercias se imponen, Kovac resultará ser un entrenador tan exitoso como sus predecesores en el Allianz Arena y los días de Löw como seleccionador efectivamente permanecerán contados.