La decisión de la FIFA de que se repita el partido Sudáfrica-Senegal de las eliminatorias para el Mundial-2018 por "manipulación" del árbitro es "ilegal", estimó el sábado la Federación Burkinesa de Fútbol (FBF) en un comunicado, amenazando con recurrir al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) de Lausana.
Burkina Faso reclama la decisión de repetir el juego entre Sudáfrica y Senegal
Estimó que la decisión de la FIFA tiene "intenciones disfrazadas" y conlleva cierto número de "ilegalidades".
"Estimamos sin rodeos que la decisión del comité de las eliminatorias busca favorecer a un equipo del grupo y daña por lo tanto a equipos como Burkina Faso, Cabo Verde o la misma Sudáfrica, que no ha perdido las esperanzas de clasificarse", reaccionó la FBF, que sospecha que la decisión tiene "intenciones disfrazadas".
La Federación Burkinesa subrayó que ha hecho saber a la FIFA "un cierto número de ilegalidades" que conllevaría su decisión.
Burkina Faso lidera el grupo de las eliminatorias africanas con 6 puntos, los mismos que Cabo Verde (2º), después de cuatro de las seis jornadas. Solo el primero de cada grupo se clasifica al Mundial.
Senegal es segundo, con 5 puntos. Había perdido ese partido ante Sudáfrica y ahora, en caso de puntuar, igualaría o superaría a Burkina Faso y Cabo Verde en la clasificación.
La decisión de la FIFA se dio "tras la confirmación del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) de aplicar la suspensión de por vida del árbitro Joseph Lamptey por manipulación de partido", explicó la Federación Internacional el miércoles en un comunicado.
Lamptey había sido suspendido primero tres meses por la Confederación Africana (CAF) por haber concedido un penal por mano inexistente a Sudáfrica y luego fue suspendido de manera vitalicia por "influencia ilegal en el resultado de un partido".