MONTEVIDEO, Uruguay.- Uruguay, actual campeón de la Copa América, acude a la 44 edición del torneo en pleno proceso de renovación pero con la aspiración de reeditar el título guiado por su capitán, Diego Godín, y por el único superviviente de su otrora temible tridente ofensivo, Edinson Cavani.
Godín y Cavani sobreviven en una renovada Uruguay que sueña en repetir título
Uruguay, actual campeón de la Copa América, acude con la aspiración de reeditar el título guiado por Diego Godín, y por el único superviviente de su otrora temible tridente ofensivo, Edinson Cavani.
Sin Luis Suárez, que cumple una sanción de la FIFA por morder al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil, y sin Diego Forlán, retirado de la selección, 'el Matador' del París Saint Germain queda como único exponente de una delantera ya irrepetible.
Las ausencias continúan en la zaga, donde Martín Cáceres no se recuperó a tiempo de una lesión en el tobillo izquierdo, y Diego Lugano, camino de los 35 años, quedó fuera de la convocatoria, por lo que Godín concentra la jerarquía.
El centrifugado aplicado por el seleccionador Óscar Washington Tabárez apartó del equipo a algunos habituales como Walter Gargano y Diego 'el Ruso' Pérez, y certificó una renovación que sumerge al equipo en un estado de incertidumbre, como afirmó el propio técnico.
Y también en un periodo de transición hacia las eliminatorias sudamericanas del Mundial de Rusia 2018, verdadero objetivo por encima de la Copa América y en cuyo trasiego la formación Celeste debe recuperar a Suárez.
El crédito le aguanta a Tabárez, líder del renacer de una Uruguay que pasó de faltar al Mundial del 2006 a sacar el cuarto puesto en el de 2010 y conquistar la Copa América de 2011.
Tabárez goza de la plena confianza del entorno y los aficionados para dirigir este nuevo proceso.
En su cabeza algunos jugadores son ya más titulares que otros y en la pizarra tiene esbozos de cómo jugar a sus rivales, pero aún hay cosas que tienen que ser evaluadas con la realidad, sobre el césped, según reconoció.
Sin Suárez, el jugador del Espanyol Christian Stuani, que ya tuvo minutos en el último Mundial, y el ariete del Burdeos Diego Rolán se perfilan como candidatos a acompañar a Cavani en el frente. A este pulso también ha entrado el prometedor Jonathan Rodríguez, quien recién cambió al Peñarol por el Benfica portugués.
En el centro del campo Tabárez tiene que buscar nuevos socios para Arévalo Ríos, y por ahí asoman Carlos Sánchez, del River Plate; y Nicolás Lodeiro, del Boca Juniors.
La retaguardia se valdrá de los centrales del Atlético de Madrid, con el mariscal Godín al mando y José María Giménez a su vera. Les acompañarán Maxi Pereira en la banda derecha y Álvaro Pereira en la izquierda en lugar del lesionado Cáceres, cuya baja Tabárez situó en el mismo nivel de importancia que la de Suárez.
En la portería no parece haber discusiones: Fernando Muslera, ahora en el Galatasaray, fue figura de la conquista de la pasada Copa América.
"¿Uruguay era favorito en 2011? Nunca lo escuché y después tuvimos la suerte de ganar", expresó Tabárez en el comienzo de la concentración de la Celeste al encarar las preguntas recurrentes sobre el favoritismo y la ambición.
Aun así 'el Maestro', como se le conoce por su anterior profesión, guarda su pequeño orgullo y tira de hemeroteca para recordar que, de 43 ediciones de la Copa América disputadas hasta el momento, 37 las ganaron sólo 3 países, y ahí está Uruguay con su récord continental de 15.
Con la máxima de ser "un equipo difícil de enfrentar para los demás" y apelando al llamado 'milagro uruguayo' que permite a este pequeño país de apenas 3,5 millones de habitantes tener dos títulos mundiales (1930 y 1950), la Celeste debutará el 13 de junio ante Jamaica.
La selección caribeña, junto a Argentina y Paraguay, completan el Grupo B, y se convierten en los primeros escollos en el camino hacia un nuevo título.