En la apuesta que le dará la re-elección como presidente de la FIFA, Gianni Infantino someterá a votación de las 211 federaciones nacionales afiliadas al organismo internacional la ampliación de la Copa del Mundo de Catar 2022 a 48 selecciones.
Análisis | Infantino: entregar el Mundial a las selecciones 90 y 158 del ranking FIFA
Por temas políticos, su plan de expandir Catar 2022 a 48 equipos precisa incluir a dos países más como organizadores: Omán y Kuwait.
Aunque la última palabra la tiene el Comité Organizador de dicho mundial, en su mayoría autoridades del gobierno catarí, Infantino comisionó estudios preliminares para analizar la viabilidad de esta expansión. Por un lado, prevé ingresar 400 millones de dólares adicionales a las arcas en Zúrich y, por el otro, precisa que al menos otro país vecino de Catar co-organice el certamen.
Medios internacionales confirman que las dos naciones favoritas de Infantino son Omán y Kuwait, cuyas selecciones, según el ranking de la propia FIFA (puestos 90 y 158), difícilmente calificarían a una justa mundialista mediante méritos deportivos.
A finales del 2018, Infantino intentó ejercer sus buenos oficios diplomáticos para aproximar las posiciones entre Catar y sus más grandes y poderosos vecinos en el Golfo Pérsico: Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos. Y es que estos dos últimos gobiernos rompieron relaciones bilaterales con Catar, acusándolo de financiar el terrorismo islamista.
Hasta la fecha, Arabia Saudita encabeza un bloqueo que prohíbe el cruce de naves cataríes por aguas y espacio aéreo árabe. De modo que Infantino no tiene más remedio que abogar por llevar la competición a naciones aún neutrales en el conflicto como son Omán y Kuwait... aunque sus selecciones poco aporten en lo futbolístico.
Si así lo hubiera querido, Infantino pudo haber impuesto la expansión esta semana en el Consejo Ejecutivo de la FIFA en Miami, donde además anunció el nuevo Mundial de Clubes de 24 equipos. Sin embargo, al esperar al Congreso anual FIFA en París a celebrarse en junio, está dejando pasar el tiempo para presionar al gobierno de Catar.
En vista de que su apuesta le entregará una re-elección (y 400 millones de dólares más), la participación de Kuwait y Omán jugando de locales un Mundial, según Infantino, está justificada.