Pintaba para ser el partido más flojo de la Copa Oro y acabó regalándonos muy buenas pinturas durante 90 minutos de partido. Martinica y Nicaragua hicieron todo menos decepcionar a la audiencia.
Martinica nos regala el gol de la Copa en el triunfo de 2-0 sobre Nicaragua
Caribeños y centroamericanos nos regalaron un agradable partido en Tennessee.
Mucho más si en el camino te encuentras la joya que Steven Langil creó en el segundo gol con el que Martinica venció a Nicaragua.
El partido tuvo de todo, dentro del campo, en la grada y quizá hasta fuera de ella. Un encuentro que increíblemente acabó 2-0 y que pudo tener uno de los mayores registros anotadores del torneo.
Martinica pudo incrementar el marcador pero el portero Justo Lorente fue la gran estrella de Nicaragua; y de la misma forma, el cuadro centroamericano tuvo varias opciones de anotar un par de goles.
El show del arquero de Nicaragua empezó a los nueve minutos con una gran atajada. Era el inicio de una noche que personalmente, nunca olvidará.
Los centroamericanos respondieron obligando al portero Kevin Olimpa a estirarse para evitar el gol de Nicaragua.
Nuevamente Lorente impediría el gol de Martinica en un par de ocasiones, pero esta vez con otra atajada para enmarcar.
Fue hasta los 34 minutos cuando el cero se rompió. Kévin Parsemain logró el 1-0 tras un buen remate de cabeza que derrotó al fin al arquero Lorente.
Previo al fin del primer tiempo, Parsemain demostró con esta jugada que en Martinica existe mucha calidad técnica en los pies de sus futbolistas.
Si bien el segundo lapso bajó un poco de intensidad, las emociones no disminuyeron. Apenas a los dos minutos de haberse reanudado el juego, Nicaragua pudo empatar el juego con un disparo que acabó estrellándose en el poste.
Fue a los 65 minutos cuando llegó la joya de Martinica con un estupendo tanto marcado por Steven Langil. Taco, túnel, carrera de casi tres cuartos de cancha, recorte al centro y definición perfecta. Un 2-0 que cerraba el marcador.
Así, Martinica se queda como el sorprendente líder del sector B por encima de Estados Unidos y Panamá, apostando por calificar por segunda vez en su historia a los cuartos de final del torneo.