Mohamed Salah es el hombre del momento en el fútbol europeo, los goles y actuaciones del delantero del Liverpool lo han vuelto tendencia en redes, una inspiración para millones de fanáticos del balompié y el deseo de varios clubes por contar con sus servicios.
El día en que Mohamed Salah mezcló la religión con el fútbol
El ahora jugador del Liverpool protagonizó un capítulo de tensión con tintes políticos durante su paso por el Basilea de Suiza en Israel.
Pero pocos recuerdan el capítulo que protagonizó el atacante egipcio en su paso con el Basilea de Suiza, donde sus raíces musulmanas afloraron, convirtiendo un partido de fútbol en un conflicto político y de creencias.
El ‘Faraón’ inició su carrera con el Arab Contractors SC en su natal Egipto, tres temporadas después su fútbol lo llevó a Suiza, donde el Basilea aposto por él con tan solo 18 años.
El deseo de crecer futbolísticamente de Salah y de jugar a en Europa fueron dos detalles que impulsaron al delantero a jugar en el equipo helvético.
Aunque Salah nunca pensó que pondría a prueba sus creencias. Se jugaba la tercera ronda previa para la Liga de Campeones de la temporada 2013-14, Basilea se medía al Maccabi Tel Aviv de Israel.
Un equipo que le generó conflicto al egipcio por sus creencias musulmanas y el viejo conflicto con los hebreos.
Salah tuvo que afrontar la eliminatoria frente al Maccabi, sacando la mayor diplomacia que pudo.
En el juego de ida en Suiza el delantero logró librar el saludo al rival durante el protocolo de la Champions League previo a los partidos con el pretexto de cambiarse los zapatos a un costado de la cancha.
El suceso brincó para muchos como una falta de respeto al equipo y a la UEFA, por no cumplir con las medidas de Fair Play, los suizos lo consideraron como un suceso circunstancial, acabando con la polémica.
Polémica que volvería a desatarse en el encuentro de vuelta. Primero por el hecho de que Salah se negaba a viajar a Israel, pero la obligación como profesional hizo que disputara la vuelta con todo y su molestia.
Durante el saludo entre los equipos Mohamed saludó con el puño cerrado a los integrantes del Tel Aviv, dejando a un lado el truco del cambio de calzado que usó en la ida.
Estos detalles tensaron a la afición, la cual abucheó y atacó verbalmente al egipcio; con lo que no contaron fue con el doblete del delantero de Basilea, quien se desquitó de los fanáticos celebrando el tanto con un rezo musulmán en el campo de juego.