El director deportivo del Inter de Milán, Piero Ausilio, no quiere hacer locuras en el plano económico, a pesar de que su equipo se clasificó, in extremis, para disputar la Champions la próxima temporada. El ejecutivo italiano dejó entrever que el club tiene limitada capacidad económica cara a la ejecución de los pactos establecidos para la contratación de Rafinha y Cancelo al término de sus respectivcas cesiones.
El Inter de Milán regatea por Rafinha y Cancelo
La escuadra italiana regresará a la Champions League y tiene como prioridad mantener a dos de sus futbolistas de referencia cedidos por Barcelona y Valencia

Rafinha pertenece al Barcelona y si el Inter le quiere mantener debe pagar 35 millones de euros pre pactados con la entidad blaugrana. Algo que el club italiano ha manifestado no poder ejecutar. Para esto, busca nuevas vías de negociación con los catalanes: alargar la cesión o rebajar el precio de la transacción.
En la misma situación está Joao Cancelo. El medio pertenece al Valencia y, tras la cesión, el Inter debía pagar otros 35 millones de euros, cosa que no ha sucedido. De hecho en el Valencia están hartos de esperar a la escuadra italiana. En este caso, además, los italianos ya han pactado un contrato con Cancelo antes, incluso, de haber resuelto su compromiso de compra con el Valencia. Esta operación es más sencilla para el Inter ya que el Valencia quiere quedarse con Geoffrey Kondogbia, cedido por los italianos. Eso sí, el precio del francés se estipuló en 25 millones de euros, lo que hace que el Inter todavía deba abonar los 10 millones restantes para hacerse con Cancelo.
El Inter quiere cerrar un equipo manteniendo las cuentas del club claras, sin hacer locuras, y garantizando una estabilidad que le permita volver a crecer como club.