Nostalgia de Ronaldo. Es lo que cabría pensar a cualquiera al término de los primeros 45 minutos en dónde el Athletic superó al Real Madrid en Bilbao. Este “nuevo” Madrid, ni es tan nuevo ni ha perdido tanto como toda la prensa mundial abrumó en el verano del adiós de Ronaldo y Zidane. Es más, propone soluciones en todas sus líneas muy diferentes a las del Real de Zidane.
El Real Madrid empata en San Mamés en un frenético partido con cierta nostalgia por CR7
El Athletic y el Real Madrid empataron a uno en Bilbao en un disputado encuentro en el que cualquier escuadra pudo llevarse los tres puntos. Benzema falló una ocasión de las que antes metía Cristiano

San Mamés es un campo complicadísimo para cualquiera. Susaeta, Raúl García, Williams y Aduriz forman un póker agobiante con alternativas a la contra y una fuerza tremenda en los balones aéreos. A la Catedral del fútbol español se viene a sufrir hoy y siempre, con Ronaldo o sin él, para Zidane o Lopetegui. Da igual, has de trabajar mucho para sacar los tres puntos. Y este Madrid sabe ponerse el mono de trabajo mejor que en otras temporadas.
El conjunto vasco conoce su feudo de memoria y este hábito le trajo el primer gol del partido. Entrada por la derecha de De Marcos que habilita el balón a Williams primero y luego Muniain con un Courtois batido desde el pase. Hasta ese momento, los blancos dispusieron de dos buenas ocasiones en los pies de Modric y Asensio. Además, controlaron buena parte del partido en la medular, con Modric y Ceballos en un buen nivel.
El fútbol va de goles y no de posesión. Daba la sensación, no en vano, que si los blancos conseguían el empate la vistosidad del partido se multiplicaría, superando la excelente presión por colocación de los de Berizzo. Un fútbol técnicamente precioso para el creyente, pero complejo de entender para el profano.
Lopetegui no lo vio nada claro y metió tras el descanso a Casemiro por Ceballos, a sabiendas que el medio campo del Athletic estaba demasiado robusto para una propuesta exclusiva de toque y calidad. Poco a poco se fueron adueñando del partido y con ello llegaron las ocasiones. De esta sucesión de llegadas cayó el gol de Isco, también incorporado tras el descanso, con un impecable cabezazo que puso las tablas en San Mamés.
Dicho y hecho. El partido se abrió y comenzó un correcalles impresionante desde el minuto 66 de esos que hacen a LaLiga española la mejor competencia de fútbol del mundo. Asensio tuvo el segundo en el 70, pero Unai Simón acertó a despejar el esférico en el mano a mano. Respondió el Athletic con una contra que Williams a bocajarro no acertó a tirar el balón al arco de un Courtois quien no hace olvidar ni por asomo a Keylor Navas. Partidazo de ida y vuelta. El que anotara se llevaba el choque.
Ambos equipos tuvieron sus opciones al final en un ambiente frenético que trajo imprecisión y dureza, pero no goles. Empate a uno y gracias. Lopetegui estuvo muy bien con los cambios y consiguió un punto de oro tras ver los resultados de teóricos rivales. Eso sí, el Barcelona se le escapa con 2 puntos arriba en la tabla. Los azulgranas son líderes en solitario. Aunque la pregunta inicial no ha quedado resuelta. ¿Se extrañó a Ronaldo? Sí, pero porque Benzema no es capaz de matar partidos. El francés la tuvo en el 88 y alguien pensó… Y si esa le hubiera caído a CR7….










