El Comité de Ética de la FIFA ha sugerido al máximo ente futbolístico una suspensión de manera provisional durante 90 días al presidente de ese organismo, el suizo Joseph Blatter, según la información brindadas por distintos medios.
Inicialmente, diversos medios informaron que esta suspensión temporal ya era un hecho; sin embargo, Klaus Stoehlker, abogado asociado de Blatter acotó que la suspensión en estos momentos sólo fue recomendada por parte del Comité de Ética.
''Blatter ha escuchado esto en diversas fuentes (...), él no ha recibido ningún mensaje de parte del Comité y tiene todo bajo control, (Blatter) irá a su oficina mañana'', dijo Stoehlker.
Por su parte, Richard Cullen, abogado de Blatter, confirmó que el dirigente suizo ''no ha sido notificado de ninguna acción tomada por el Comité de Ética de la FIFA''.
Blatter sería suspendido después de que el pasado 25 de septiembre el Ministerio Público de la Confederación Helvética abriera un proceso penal contra él por sospechas de gestión desleal y abuso de confianza.
Entre otras cosas, la Fiscalía reprocha a Blatter "un pago desleal" de dos millones de francos (unos dos millones de euros al cambio de hoy) al presidente de la UEFA, Michel Platini "en perjuicio de la FIFA".
El dinero estaba destinado "supuestamente" a obras efectuadas entre 1999 y 2002, aunque el pago fue realizado en 2011, especificó la Fiscalía.
Asimismo, el Ministerio Público recrimina a Blatter haber firmado un contrato contrario a los intereses de la entidad con la Unión Caribeña de Fútbol, presidida por Jack Warner, antiguo vicepresidente de la FIFA y estrecho colaborador del presidente.
El Ministerio Público considera que al firmar dicho contrato, Blatter perjudicó a la entidad, especialmente FIFA Marketing & TV SA, lo que según la Fiscalía representaría "una violación de sus deberes de gestión".
La FIFA está envuelta en un caso de corrupción desde mayo pasado, cuando en vísperas del Congreso que reeligió como presidente a Blatter se detuvo a directivos y colaboradores de la organización por presunta corrupción, en el marco de una investigación de la Justicia estadounidense en colaboración con la suiza.
Paralelamente a la investigación estadounidenses, las autoridades suizas iniciaron pesquisas sobre la atribución de los mundiales de 2018 y 2022 a Rusia y Catar, respectivamente, que se han ampliado a otros asuntos.