FRANCIA.- La investigación sobre paraísos fiscales conocida bajo la denominación ' Panama Papers' salpica a importantes personalidades de distintos campos, incluido el deporte, donde se citan los nombres de Lionel Messi, Michel Platini o de dirigentes de la FIFA, entre otros.
Filtran datos sobre activos de Messi, Platini y más en un paraíso fiscal
Una filtración de documentos publicada expuso los activos financieros de presidentes y personalidades de todo el mundo en paraísos fiscales, una lista que menciona al presidente argentino Mauricio Macri y a personalidades como Michel Platini y Lionel Messi.
La Federación Internacional de Fútbol (FIFA), sacudida en el año 2015 por los escándalos de corrupción, ve ahora como uno de los integrantes de su Comité de Ética, el uruguayo Juan Pedro Damiani, es señalado por posibles relaciones laborales con hasta tres acusados en esos escándalos.
El gabinete de abogados de Damiani, que es ademas el presidente del Peñarol, trabajó con siete empresas 'offshore' relacionadas con el también uruguayo Eugenio Figueredo, exvicepresidente de la FIFA y expresidente de Conmebol que fue uno de los siete primeros detenidos en Zúrich en la operación que destapó el conocido como ' FIFAGate', en mayo del pasado año.
"No se muestran conductas ilegales por parte de Damiani o su gabinete, pero generan nuevas preguntas para Damiani y la FIFA", dice el informe del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).
Un portavoz del Comité de Ética dijo a la ICIJ que Damiani informó a la organización en marzo sobre sus actividades relacionadas con Figueredo.
"Estoy muy tranquilo", aseguró Damiani al diario El Observador de su país tras conocerse la información, subrayando que fue "el primero que denunció lo que nadie había denunciado" en la lucha contra la corrupción en el fútbol.
El abogado uruguayo habría también servido de intermediario ante una sociedad con sede en Nevada (Estados Unidos) y ligada a los empresarios argentinos Hugo y Mariano Jinkis.
El yate de Valcke
Esos últimos, dirigentes de una empresa de marketing deportivo, también fueron perseguidos por la justicia estadounidense por el presunto pago de sobornos millonarios para la obtención de derechos televisivos.
El francés Jérôme Valcke, exsecretario general de la FIFA, despedido en enero después de haber sido acusado en un caso de reventa de entradas del Mundial-2014, aparece también en los documentos como propietario de una empresa con sede en las Islas Vírgenes Británicas y creada en julio de 2013, aparentemente para comprar un yate registrado en las Islas Caimán.
Entre los futbolistas incluidos en los Panama Papers destaca sin duda el nombre del astro argentino Lionel Messi, que ya se había visto inmerso en España en un caso de fraude fiscal.
Según La Sexta y El Confidencial, medios españoles que colaboraron con la investigación, Messi reaccionó a esas acusaciones de fraude fiscal en España con la compra de una sociedad en Panamá para utilizarla como pantalla y ocultar bienes.
La firma de Messi aparecería en un documento en el que se exculpa al gabinete Mossack Fonseca "de cualquier problema que pudiera causar su sociedad en Panamá".
El entorno de Messi tiene previsto emitir un comunicado el lunes para desmintir la información, publicó La Sexta en su página web.
Platini remite a Suiza
Otros futbolistas o exfutbolistas salpicados por la investigación de los 'Papeles de Panamá' son el chileno Iván Zamorano, el argentino Gabriel Heinze o el croata Darko Kovacevic, destaca La Sexta.
El exfutbolista Michel Platini, por su parte, habría recurrido a los servicios de Mossack Fonseca en 2007, año en el que fue designado presidente de la UEFA, para administrar una sociedad en Panamá.
Platini emitió un comunicado el domingo para recordar que rinde cuentas ante "la administración fiscal suiza, país en el que es residente fiscal desde 2007".
El mítico exjugador de la Juventus está actualmente a la espera del veredicto de su recurso ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) sobre los seis años de suspensión de toda actividad relacionada con el fútbol, con la que fue castigado por el controvertido cobro de 1,8 millones de euros de manos de Sepp Blatter, entonces presidente de la FIFA, en el año 2011.