Javier Aguirre, técnico del Mallorca, explicó que mandó a callar a sus jugadores durante el encuentro ante Alavés, donde su equipo se impuso por 2-1, porque le estaban reclamando mucho al árbitro.
Javier Aguirre dijo que mandó a callar a sus jugadores porque "estaban insoportables"
Tras la victoria ante Alavés, el técnico de Mallorca Javier Aguirre dijo que ayudó al árbitro al calmar a sus jugadores y son tres puntos muy valiosos, pero no definitivos para evitar el descenso.
"Le pregunté al árbitro qué fue lo que marcó. Sorprendentemente anduve muy tranquilo, cuando ladro mucho mi voz es ronca, pero hoy le ayudé al árbitro a calmar mis jugadores porque estaban insoportables: ‘ya cállense’. Pero sabe mejor la victoria”, dijo el 'Vasco' Aguirre en la conferencia de prensa tras el encuentro de la Jornada 33 en LaLiga.
El estratega mexicano señaló que la victoria ante Alavés es importante, pero dista mucho de ser un resultado definitivo para evitar el descenso a la Segunda División de España.
"Es un respiro para los jugadores, el fin de semana no hay futbol, tendrán su libertad y les devolveré aquello que les robé… luego la visita al dentista. Estamos cuatro equipos en la misma guerra, ganaron dos de abajo y se apretó todo. Y lo dijo el gran Luis Aragonés que la liga se define en los últimos 10 partidos", agregó Aguirre.
“Partido con mucha tensión, ambos equipos jugándonos nuestro futuro, con nervios, ninguno expuso su juego en la primera parte. En la segunda nos metían pelotas largas y nos obligaban a replegarnos. El autogol nos puso un pelín más nerviosos y con los ocho minutos agregados se volvió más tenso. Son tres puntos, pero no definitivos para la salvación”.
Con este resultado, el Mallorca llegó a 32 puntos y se colocó en el lugar 16 de la clasificación, tres unidades arriba del Granada que, de momento, es el último que descendería si no logra mejorar su lugar.