Lainez: el niño criado por La Volpe que se hará hombre con Betis de Setién

Esa frase sobre que madurar en el fútbol implica "aprender a decidir mejor" se refiere a que el futbolista logre adaptarse a distintas posiciones: el mediocampista en círculo central ha de pensar antes que disparar. Y el delantero en el área chica ha de reaccionar antes que detenerse a pensar.

Cuando Ricardo Antonio La Volpe lo debutó con 16 años en el Clausura 2017, Lainez aportó regate y velocidad a un América eliminado en fase regular sin siquiera clasificar a liguilla. Y es que tras percatarse que aquella escuadra azulcrema carecía de recursos para jugar al tradicional Lavolpismo, 'El Bigotón' halló en Lainez a ese extremo capaz de hacer funcionar un 4-4-2.

" Soy el padre futbolístico de Lainez, lo voy a cuidar," dijo el técnico argentino. Y así fue. Se aseguró de que el adolescente americanista fuera visto en la Liga MX como un hombre de banda cuya habilidad para jugar a perfil natural o a pierna cambiada le transformó en un explosivo recurso ofensivo.

Duramente cuestionado por no darle más minutos, Miguel Herrera acabó haciéndolo indiscutible de su 4-2-3-1 campeón del Apertura 2018. La liguilla del más reciente título azulcrema se recordará tanto por la victoria ante Cruz Azul como por esa imagen del defensor de Pumas Alan Mozo siendo desquiciado hasta perder los estribos por el talento de Lainez.

Para Lainez su salida del América marca el final de su adolescencia, mientras que el arribo al Betis de Sevilla es el inicio de su madurez. El director técnico del Betis, Quique Setién, labró su reputación en España ascendiendo a la Unión Deportiva Las Palmas con un innovador sistema táctico similar al de Ricardo La Volpe.

Hablamos de un estilo de fútbol en el cual los recursos ofensivos también son recursos defensivos. La revelación verdiblanca de esta temporada, el carrilero hispano-dominicano Junior Firpo, ataca y defiende y domina los dos perfiles.

Si La Volpe fue el padre de Lainez, Setién será su mentor y Firpo será su compañero de clase más avanzado.

Ha llegado pues el tiempo de hacerse hombre futbolísticamente hablando en España, donde quienes toman las mejores decisiones son quienes saben cuándo pensar y cuándo ejecutar. A veces atacando, otras defendiendo, Lainez habrá de madurar, sin olvidar todo aquello que aprendió cuando un viejo bigotón lo invitó a entrenar en los campos de Coapa con los mayores de edad.