Joan Francesc Ferrer "Rubí", del Betis, afirmó tras la derrota por 5-1 ante Villarreal que el segundo tanto del equipo local, que puso el 2-1 en el marcador, lo cambió todo y recalcó que los minutos finales fueron “un desastre”.
Los minutos finales fueron “un desastre” para el Betis
Rubí dijo que el equipo se cayó en la recta final del partido ante Villarreal; Lainez entró al 79’.
"Creo que se ha visto un partido maravilloso hasta el minuto setenta con una primera parte igualada y que estábamos siendo superiores y con opciones", dijo.
El mexicano Diego Lainez entró al minuto 79, pero no logró enderezar el partido, justo cuando ya estaba 3-1 en contra del Betis. Andrés Guardado se quedó en la banca en el Estadio de la Cerámica.
"Llega una jugada en la que no entiendo que se mire a cámara lenta porque no era tan clara y a partir de ahí, mi equipo ha sido un cero", indicó Rubí.
Rubí considera que el marcador ha sido demasiado abultado y que su equipo fue "un desastre" en los minutos finales. "Estamos disgustados, ya que se estaba viendo uno de los mejores Betis del año hasta entonces", indicó.
Añadió que no se pueden venir abajo por un error. "Nos han metido cinco y eso nos va a doler todo el año, pero debemos pensar que es solo un partido", concluyó Rubí.
Por su parte, el capitán de Betis, Joaquín Sánchez, afirmó que su equipo se iba "jodido" tras el 5-1 recibido en La Cerámica ante el Villarreal porque el VAR les había perjudicado.
Villarreal marcó su segundo tanto en un penalti que puso el 2-1 en el marcador y que fue criticado por Joaquín al considerar que el VAR sólo debe entrar cuando la acción "es blanca o negra", tal y como se les dijo a principio de temporada.
"Si lo pones a cámara lenta, ves que hay contacto, pero el fútbol es de contacto y éste debe ser fuerte para que se pite", agregó Joaquín, quien admitió que tras ese gol, su equipo dio "un paso atrás" y se llevó tres goles más.
"Se perjudica al futbol porque a veces no se ven las intenciones en este tipo de jugadas", dijo el jugador andaluz.