Los partidos del Barcelona contra el Sporting de Gijón y del Real Madrid contra la Roma rompieron récords e hitos que estaban bajo la lupa.
Messi y Cristiano Ronaldo siguen su guerra contra números y pronósticos
Los partidos del Barcelona contra el Sporting de Gijón y del Real Madrid contra la Roma rompieron récords e hitos que estaban bajo la lupa.
Lionel Messi no deja de ser protagonista. Cada día, cada partido, tiene algo nuevo que decir. Esta vez marcó sus goles 300 y 301 con el Barcelona en la Liga, este último gol fue el 10 mil de la historia del Barcelona.
Cuando no inventa un penalti hace un gol maravilloso, y si no rompe alguna marca de esas que van rodando por ahí durante años. Todo esto lo ha hecho en 334 partidos, nada más y nada menos que una media 0.90 goles por partido. Y cada día se aleja más como máximo goleador de la historia de la Liga.
En total Messi suma 439 goles en todas las competencias desde su debut en el 2004.
El otro protagonista de la jornada fue Cristiano Ronaldo. EL luso llegó a Roma rodeado de incertidumbres bajo acusaciones de que no marca fuera del Bernabéu.
CR7 calló a los escépticos con su gol 12 de Champions en apenas 7 partidos. El Olímpico de Roma vio como Cristiano puede marcar en cualquier lugar, aunque no lo hacía fuera de la casa del Real Madrid desde el 29 de noviembre.
Otro protagonista volvió a ser Luis Suárez con su gol 24 en Liga, y eso que esta vez falló otro regalo de Messi, un penalti que la Pulga le dejó cobrar directamente, sin trucos ni engaños. Suárez se desquitó con gol de jugada y aventaja a Cristiano que suma 21 goles, aunque de los del portugués 5 son de penalti, un derecho que a Suárez solo le llega por buen compañerismo.