Ciudad de México, MÉXICO.- América se coló a la final de la Liga de Campeones de la Concacaf en tiempos extra y jugando con 10 hombres, luego de un terrible error de Agustín Marchesín que hasta ese momento, el minuto 101, había sido el mejor hombre no sólo de Santos sino del encuentro.
América 1-0 Santos: Terrible error de Marchesín y América va por el bicampeonato
América buscará el bicampeonato en la Liga de Campeones de la Concacaf y enfrentará en la final a Tigres de la UANL.
Pero ya se sabe que esa posición guarda siempre su toque de ingratitud y así en un tiro libre cobrado por Michael Arroyo, Marchesin metió mal las manos y el balón se metió al arco para el definitivo 1-0. Así las Águilas buscarán el bicampeonato de la zona al enfrentar a Tigres en la final.
El duelo de vuelta resultó tan trabado como el de ida, pero pese a todo contó con varias oportunidades de gol. La figura era, hasta el momento de la anotación, el arquero de Santos, Agustín Marchesín, que al menos contuvo cuatro chances importantes de anotar de las Águilas y en cada una de ellas se lució de gran manera.
La más espectacular, una bella jugada de Rubens Sambueza que Andrés Andrade trató de culminar, pero Marchesín atajó de manera sorprendente.
Por parte de Santos, Martín Bravo estuvo muy activo y pudo marcar tras robar el balón a Goltz, pero lo estrelló en el travesaño cuando tenía la portería para él solo.
El partido transcurrió con esa tónica, América llegaba y golpeaba el muro que era Marchesín y los Guerreros a la espera.
Cuando parecía que los tiempos extra alcanzarían el partido sin novedad, la indisciplina volvió a aparecer en el seno de las Águilas.
Darwin Quintero se barrió de manera imprudencial y por detrás sobre Diego “Pulpo” González y el primero salió expulsado y el segundo de cambio lesionado.
El duelo siguió entrampado en el primer tiempo extra y ninguno de los cuadros, particularmente Santos que estaba completo, tomó el balón con la decisión suficiente de ir al frente.
Pero ciertamente fueron las Águilas las que presionaron más y buscaron con mayor insistencia el arco rival.
Esta clase de duelos, sólo se definen de dos maneras, por una gran jugada o un gran error y ocurrió precisamente el segundo.
Michael Arroyo cobró un tiro libre a unos metros del área, pero lo hizo a las manos del arquero Agustín Marchesín y la gran noche del arquero argentino se transformó en pesadilla.
Intentó tomar el esférico con las manos, en lugar de despejarlo con los puños, y éste se escurrió entre sus guantes hasta las redes.
Con el gol de desventaja, los de La Comarca fueron al frente, pero no contaron ni con la claridad ni con la contundencia pese a tener un hombre más.
América aguantó de buena manera y todavía tuvo alguna oportunidad de gol de Benedetto que estrelló el balón en un poste.
Las Aguilas se verán las caras con Tigres en la final de la Liga de Campeones de la Concacaf. El campeón representará a la zona en el Mundial de Clubes.