La diferencia que Chivas y América sacaron en el juego de ida de octavos de final de la Concacaf Liga de Campeones es casi definitiva para avanzar en la serie, pero ni cerca está de serlo para su jerarquía.
¡Mucho en juego! Chivas por la confianza y América por la autoridad en Concacaf
El Rebaño Sagrado debe ganar sí o sí para encarar con mayor confianza el clásico nacional; mientras que América debe dar un manotazo en la mesa.
Los duelos de vuelta ante Cibao de Republica Dominicana y el Saprissa de Costa Rica tienen mucho en juego tanto para rojiblancos como para azulcremas y lejos están de ser un mero trámite como muchos indican.
Vamos con el duelo en el que Chivas recibirá al cuadro caribeño.
El 0-2 que el equipo de Matías Almeyda consiguió en el duelo de ida no responde aún a las diferencias que existen entre ambos cuadros.
Chivas recibe a un equipo semiprofesional al que tiene que golear para tomar confianza en el futuro inmediato, tanto para el clásico nacional como para el potencial duelo ante el Seattle Sounders en los cuartos de final.
Si el Rebaño Sagrado no consigue al menos una diferencia de cinco o seis goles en el marcador global, las dudas volverán y la confianza seguirá alejándose de cara al duelo ante el acérrimo rival.
Más tarde, América jugará la vuelta de un partido, sino la oportunidad de dar la exhibición de autoridad que se le exige al más ganador del área.
La diferencia de cuatro goles que sacó de Costa Rica hoy debe pensarse como un 0-0 global y las Águilas deberán salir a crear una diferencia aún más grande que responda a su jerarquía en la Concacaf.
A diferencia de Pumas, equipo que perdió una final ante el Saprissa, América tiene la encomienda de aplastar a su rival y generar miedo de cara al clásico nacional.
De ahí que los duelos de vuelta en el Estadio Akron y en el Estadio Azteca tengan mucho en juego y poco de 'mero trámite' para los equipos mexicanos.