De América para el mundo

Desde los inicios de su carrera, Francisco Guillermo Ochoa Magaña mostró cualidades interesantes (llamó la atención desde su debut en un triunfo 3-2 ante Rayados de Monterrey en febrero de 2004). El guardameta de Coapa se proyectó rápidamente a los primeros planos del futbol mexicano, a tal grado que formó parte de la plantilla que asistió al Mundial de Alemania 2006 con solo 21 años cumplidos.

Campeón con América en 2005, Ochoa se convirtió en un baluarte en la meta americanista. Bajo las órdenes de Néstor Verderi, el oriundo de Guadalajara tuvo una formación casi impecable y que rindió frutos tanto a nivel individual como en el plano colectivo.

El 2007 fue especial para Ochoa. América jugó Copa Libertadores en aquel año y, aunque las Águilas se quedaron en Cuartos de Final, el portero exhibió su nivel en el certamen internacional, misma faceta que lo llevó a ser pieza fundamental del conjunto Campeón de 2005. Incluso, Ochoa jugó 2 partidos en días consecutivos: Cuartos de Final de ida ante Santos de Brasil (Libertadores) y Semifinal de Ida ante Chivas (Liga), los dos en el Estadio Azteca.

La prestigiosa revista “France Football”, que por entonces organizaba la entrega del Balón de Oro (el premio más exclusivo en el balompié mundial) reconoció la trayectoria del juvenil arquero al incluirlo entre los 50 nominados a llevarse un premio que reconoce (como regla no escrita) a jugadores del futbol europeo y, casi por lo general, a atacantes.

Guillermo Ochoa, mexicano, del futbol en América, y portero (solo el guardameta Rogerio Ceni del Sao Paulo también conformó la lista ese año), entró en el selecto grupo de candidatos. El Club América tenía un reconocimiento más (aunque fuera extraoficial), esta vez, desde el viejo continente, un hito también en la historia del futbol mexicano.