El momento que vive el arbitraje en México es inestable, muchos silbantes han decidido dejar todas las decisiones al VAR por temor a ser castigados si no usan la herramienta. Cada vez hay menos confianza en la Comisión de Arbitraje, al grado de tomar como medida dejar celulares lejos en cada junta, por temor a que algo se filtre a los medios de comunicación.
Álvaro Cruz | Jorge Pérez Durán, el árbitro incómodo en la Comisión
Una discusión con Julio Escobar detonó el enojo directivo y el VAR lo abandonó a su suerte.
Todo esto me lo contaron algunas fuentes bien informadas al respecto, que saben muy bien la consigna que hay contra Jorge Pérez Durán por haberse atrevido a externar su descontento cara a cara con Julio Escobar, uno de los asistentes en la comisión que ya tuvo problemas con Adalid Maganda el año pasado.
Pérez Durán fue el árbitro del Santos contra Tigres, donde se suscitó la polémica agresión de Nahuel Guzmán a Eduardo Aguirre tras una obstrucción del jugador lagunero al portero felino. Arturo Brizio aceptó que debió ser roja para Nahuel, pero. ¿Qué pasó con el VAR y su nula intervención?
Mis compas me dijeron que se veía muy raro que una jugada tan clara no la mandara Peñaloza (Árbitro VAR) en ese partido, así que soltaron la sopa: “Quieren sacar a Pérez Durán por aquella discusión con Julio (Escobar). Jorge es muy frontal y eso no les gusta”.
Para colmo, ese grave “error” de Pérez Durán, que no vio la jugada y el VAR no lo asistió, le costó no estar este fin de semana y podría perderse hasta dos o tres juegos más. Peñaloza tampoco fue requerido esta jornada.
SUELDOS VAR
Los árbitros VAR y AVAR tienen sueldos competitivos y por eso todos quieren estar ahí, aunque no tengan experiencia, aunque hayan cambiado una cédula como Jonathan Hernández en sus tiempos de silbante.
Resulta que un árbitro VAR cobra 12,500 pesos por partido, aprox. Un AVAR está en los 7000 por juego. Por eso todos quieren hacerse notar y revisaron más de 100 jugadas, según los números de Brizio, no vaya a ser que me los limpien y a nadie le cae mal una lanita así.