Candil de la calle, oscuridad en casa. La historia de Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Bipolar. Vaya, hay tantas analogías para hablar del América en el Apertura 2016.
América: candil de la calle y oscuridad de su casa en el Apertura 2016
A las Águilas, pese a tener más juegos de local que ningún equipo en el Apertura 2016, le cuesta ganar en el Estadio Azteca.
¿Cómo es que un equipo tan vilipendiado, con tanta animadversión de su afición hacia su entrenador, está aún en zona de Liguilla? Sí, el América va séptimo, lo cual no cambiará pase lo que pase en el único partido que queda de la Jornada 9, entre Santos y Pumas.
América es la peor defensa del torneo (17 goles en contra), empatada con la de Chiapas, pero también tiene el segundo mejor ataque con 16 tantos anotados, sólo debajo de los 18 de Morelia e igualados con Tijuana y Pachuca. Si lo vemos con el vaso medio lleno, ver un partido de las Águilas es garantía de goles.
También es el equipo más efectivo de visita del torneo, con siete puntos en tres partidos (78% de los puntos en disputa obtenidos), pero la misma cantidad de unidades como local en el doble de encuentros.
Lo preocupante es precisamente lo que ha pasado en el Azteca: con tres juegos como local consecutivos para iniciar el torneo, tras negociar con el Toluca por la remodelación del Estadio Nemesio Diez el duelo de la jornada 2, iniciaron con victorias sobre Chiapas y los propios Diablos Rojos, pero a partir de ahí, una goleada 0-3 ante Tigres, empate 1-1 con Morelia, el dolorosísimo descalabro de 0-3 en el Clásico ante Chivas y la derrota de este sábado 0-2 ante León.
Ah, y hay que recalcarlo: en el torneo del Centenario, al América es al que le pesa el Estadio Azteca.
Estamos a la mitad de la campaña y una cosa es cierta: América, pese a todo, si el certamen terminara ahora, aspiraría al campeonato. Así de gitana es a veces la Liga MX que permite que pueda alzar la copa un equipo cuyo entrenador es repudiado por la mayor parte de su afición.