Veinte meses después de aquel 'agarrón' en el estadio Akron, en donde intercambiaron algunos insultos y manoteos, André-Pierre Gignac y Tomás Boy sellaron su reconciliación.
Así fue la reconciliación entre Tomás Boy y Gignac
Casi dos años después, 'el Jefe' y Gignac, históricos de Tigres, firmaron la paz.
Al término del duelo de este sábado entre Tigres y Mazatlán, el cual concluyó con un sorpresivo triunfo de los mazatlecos en casa de la UANL y en donde el galo erró un penal provocando las burlas de su rival, 'el Jefe' y Gignac se fundieron en un abrazo, con el cual dejaron atrás las rencillas suscitadas casi dos años atrás.
Boy fue quien buscó el acercamiento con el francés, quien amablemente aceptó el gesto del estratega; posteriormente, tras cruzar algunas palabras, aparentemente en tono de broma, tanto Gignac como 'el Jefe' intercambiaron algunas sonrisas y pusieron rumbo a los vestidores del Volcán.
¿POR QUÉ SE PELEARON TOMÁS BOY Y GIGNAC?
El 28 de julio de 2019, Chivas y Tigres cerraban la jornada 2 del Apertura 2019 en casa del Rebaño Sagrado.
En aquel entonces, Gignac estaba igualado en registro goleador con el Jefe (104 anotaciones), a sólo un tanto de convertirse en el máximo romperredes de Tigres en la historia.
A los 64 minutos del partido, el colegiado Óscar Macías amonestó a Boy por sus acostumbradas reclamaciones; el 'Jefe' alegaba que Gignac estaba dirigiéndose a él en un tono poco agradable.
Los intercambios entre ambos subieron de tono hasta que el 'Jefe' provocó su expulsión, tras mentarle la madre al jugador de los Tigres. "Yo soy el número uno", gritaba Boy a Gignac, quien, a la distancia y tocándose el escudo del jersey, le indicaba al entonces técnico de Chivas que abandonara el campo.
Hoy, con un Gignac como máximo goleador de la institución (154 goles en total y 145 en la Liga BBVA MX), y Tomás Boy liderando el reciente proyecto de Mazatlán, la afrenta parece haber llegado a su final.