Todo inició antes de que Pumas y América siquiera estrenaran sus duelos en Primera División en 1962. El conjunto universitario militaba en Segunda y estaba integrado, en su gran mayoría, por estudiantes de la UNAM.
Así inició la rivalidad entre Pumas y América
Todo empezó antes del debut de los universitarios en Primera División, justamente contra los de Coapa, en 1962.
En aquellos días, también había alumnos de la máxima casa de estudios del país jugando para el América. Se les invitó al representativo de la Universidad y nunca quisieron; justo ahí nació la rivalidad entre ambas instituciones.
La historia la cuenta Guillermo Vázquez Mejía, personaje histórico de Pumas, que como jugador fue parte del equipo que ascendió a los de Azul y Oro en 1962
Padre de Guillermo Vázquez Herrera, que ha sido hasta en tres ocasiones director técnico de los universitarios. Vázquez Mejía, además, fue auxilar técnico de Miguel Mejía Barón en el campeonato del 91 y pasó un largo periodo al frente de la dirección de Fuerzas Básicas de la institución.
Antonio Sancho, Rafael García, Jesús Olalde, Pablo Barrera, Jaime Lozano y muchos más surgieron bajo cobijo.
Aquí la historia contada por Vázquez Mejía en la extinta revista Soccermanía.
"Cuando Pumas jugaba en Segunda había jugadores del América en la Facultad de Ingenieria. Otros en Comercio y se les invitó. Nunca quisieron. Desde ahí empezó la rivalidad porque no habían querido jugar con nosotros y sí con el América. No pensaron que llegaríamos a Primera".
"Me acuerdo ahora mismo de Figueroa que estudiaba en Contaduría, 'El Gato' Lemus en Ingeniería o de Buendía. Entonces, de alguna manera, todo empezó así y en el torneo Interfacultades. Ahí jugábamos todos. Cuando los teníamos enfrente no sabías si era el América o era un Interfacultades. Esa rivalidad se empezó a extender de la cancha a la tribuna", explicó.
Por supuesto que Pumas se estrenará en Primera División ante el América el 1 de julio de 1962 en el Estadio Olímpico Universitario, también tuvo mucho que ver.
"Ese día, Ortiz Tirado, que era nuestro presidente y era antiamericanista, aunque no sé porque... en esos días no nos daban primas, pero sí unos centenarios si ganábamos, pero nos dijo que si ganábamos tendríamos premio doble y todos pensamos que padre. Pero perdimos".
El tiempo hizo el resto: “Y todo se afianzó con las tres finales que se jugaron en los 80´s y 90´s", finalizó.