Christian Giménez no tiene nada en contra de América o ningún equipo en el que haya jugado, pero sí reconoce que quiso demostrarle a las Águilas que se equivocaron al dejarlo ir.
Chaco mantuvo hambre de demostrar a América que se equivocó
Christian Giménez canalizó su sentimiento para destacar con Pachuca al salir de las Águilas.
"Obviamente cuando salgo de América (Apertura 2006) tenía contrato firmado por una cierta cantidad de años y de repente de un día para otro te dicen que no vas a continuar, que hay un cambio por un jugador de Pachuca a América (Nelson 'Pipino' Cuevas) y que yo iba a Pachuca.
"Como que esa rivalidad y ese juego sagrado que tenía por dentro lo quería transferir y quería cambiar en motivación para demostrar que laboralmente como jugador era bueno y que se habían equivocado", comentó Chaco para Versus Digital.
El exjugador asegura que guarda buenos recuerdos de todos sus equipos, pero recalca que tenía "hambre de demostrar en su momento que (América) se había equivocado".
La carrera de Giménez dio un giro en Pachuca, donde de 2006 a 2009 logró la Copa Sudamericana (marcando el gol del triunfo), un título de liga y dos campeonatos de Concacaf.
Aun así, ni esos logros se aceraron al momento que más valora en su carrera: cuando coincidió con su hijo Santiago Giménez en la cancha durante un amistoso.
"No lo cambio por nada porque lo que sucedió con Santiago fue muy intenso, fue un año porque lo habían llevado de a poquito a entrenar con nosotros y el primer día fue muy contrastante, muy chocante, tenerlo de compañero en un entrenamiento fue muy difícil.