Un gol espectacular de Cardona le bastó al Pachuca para llevarse una importante victoria que los coloca ya entre los 8 mejores del certamen, aunque considerando que el Atlas jugó desde el 32' con 9 hombres, se entiende que el público haya despedido a sus jugadores entre abucheos.
Con el VAR como protagonista, al Pachuca le bastó un golazo de Cardona para amarrar la victoria y la Liguilla
El VAR se hizo presente en tres ocasiones y derivó en dos atlistas expulsados y un gol al Tuzo anulado.
El protagonista del primer tiempo no fue Pachuca, ni Atlas, ni el futbol, sino el VAR, que se apareció tres veces en menos de 30 minutos. El árbitro recurrió al él al 6' para expulsar al 'Rifle' Andrade debido a una 'plancha' sobre Jorge Hernández, al 22' para anularle un gol al Pachuca por una supuesta mano del 'burrito' a ntes de la anotación y al 30' para dejar al Atlas con 9, expulsado a Jorge Segura por un pisotón a Víctor Guzmán.
Se agregaron once minutos en total y Pachuca, en vez de aprovechar la superioridad numérica, intentaba tomar la ventaja con disparos lejanos, su recurso más usado, pero que no fue redituable. La más peligrosa de los locales fue un cabezazo de Leo Ulloa que el guardameta sacó con una espectacular atajada.
Palermo sabía que no podía mantener esa formación y en busca de aprovechar los dos hombres de más retiró a Pablo López y 'Mani' García para darle entrada a Ismael Sosa y Angelo Sagal, sin embargo, el gol cayó en una jugada que podía haberse dado así el Atlas tuviera equipo completo, un 'riflazo' lejano de Edwin Cardona que no paraba nadie. Fue un una fastuosa anotación.
Los Tuzos eran los amos del partido pero no lograban generar el peligro esperado, aunque si no habían aumentado la ventaja era por la falta de puntería de Sosa que se perdió una muy clara al 66' pero en mayor medida por la magnífica actuación de Edgar Hernández que estaba convertido en una auténtica pared.
El cancerbero de 36 años al 69' y al 73' le robó el segundo al Pachuca. Primero con una atajada a primer palo tras un nuevo disparo de Sosa y después en una doble intervención mostrando reflejos felinos y valentía al salir a cortar la segunda jugada.
Sobre los últimos minutos, los hidalguenses continuaron buscando el arco de los Zorros pero cada vez con menos agresividad, por uno o por nueve, los de Martín Palermo sabían que la victoria te da 3 puntos invariablemente, así que decidieron aguantar la pelota. Se diluyeron los segundos y el local alcanzó los 28 puntos, asegurando su puesto en Liguilla, aunque el funcionamiento dejó mucho que desear, por lo que el encuentro terminó con pitidos del público.