Y no, Rayados simplemente no puede con Tigres en su estadio. Dominaron, fueron mejores en gran parte del partido pero no supieron sentenciar el juego y terminaron pagándolo caro con el 1-1 final que deja un sabro agridulce para los locales.
¡El líder sacó las garras! Tigres rescató un punto con colaboración de Barovero
El cuadro de la Autónoma de Nuevo León aprovechó un descuido de Barovero para rescatar el empate en el Clásico Regio.
Todo indicaba que Rayados se llevaría la victoria pero displicentemente dejaron crecer a su rival hasta que les empataron.
Los primeros minutos fueron de evidente estudio, aunque los roces estuvieron a la orden del día. Desde el inicio los jugadores de ambos cuadros metieron la pierna como se hace en un clásico.
Pasados los primeros 10 minutos, Tigres tuvo una extraordinario oportunidad, un disparo de Eduardo Vargas tras un gran centro por debajo de Luis Quiñones. El chileno estaba frente al arco, pero no le dio correcta dirección a su disparo.
Al 16’ Funes Mori dejó ir una increíble, controló de pecho dentro del área ante la complacencia de la zaga ‘felina’ y al disparar, su pelota se estrelló en la humanidad de Guzmán.
Aunque no había un dominador claro, Tigres tuvo que empezar a abusar de las faltas para frenar los embates de ‘La Pandilla’, que apelaba a sus futbolistas más veloces para llevar la pelota cerca de del área rival, incluso el árbitro le perdonó una roja a Francisco Meza que hubiese cambiado el rumbo del encuentro.
Con el pasar de los minutos, Tigres fue siendo más peligroso y al 30’, Julián Quiñones envió un disparo violentísimo desde el área que de ‘milagro no acabó en la red. El equipo de Ferretti no se intimidaba ante el del Alonso.
Pero cuando más apretaba Tigres, llegó la genialidad. Funes Mori y Vangioni completaron una pared dentro del área que abrió espacios en el cerrojo universitario y finalizó con el ex River Plate recibiendo de espaldas a la portería, por lo que resolvió definir con un ‘taconazo’ que nadie esperaba, enviando la pelota a ‘besar’ la red.
La tribuna explotó y no era para menos, Rayados ya ganaba el Clásico y con una genialidad de su goleador.
Ya para la parte complementaria, ambos cuadros buscaban incesantemente el arco rival pero la falta de precisión fue el factor común. Aunque acababan las jugadas, ni inquietaban a los arqueros.
Hasta el 61’, Tigres volvió a generar una que dejó pasmada a la tribuna del BBVA, cuando Vargas recibió un balón filtrado dentro del área, apareciendo desde la banda. El chileno golpeó y la pelota pasó rozando la línea de gol, pero terminó yéndose fuera del campo.
Cuando corría el 67’, Luis Quiñones ganó un balón dividido a las afueras del área, le hizo un ‘sombrerito’ al zaguero que lo apretaba y tiró ‘de aire’ pero una espectacular reacción de Barovero evitó el empate de Tigres.
El cuadro de la UANL ya era más, al 67’ Guido Pizarro sacó un ‘riflazo’ desde la punta del área que obligó a ‘trapito’ a meter las manos y enviar a tiro de esquina.
Solo un par de minutos después, Luis Quiñones sacó un tiro que pasó a centímetros del arco. Era una advertencia de lo que venía, el mismo colombiano, en la siguiente jugada, encontró el empate al percatarse de como Barovero descuidó su primer poste esperando el centro, por ese hueco, Quiñones puso la bola y rescató el liderato para Tigres.