Indicador Futbolero, Un digno partido entregaron americanistas y celestes

Hasta las lágrimas llegaron miles de seguidores de América y Cruz Azul, lo mismo quienes vivieron en vivo esta dramática serie de semifinales en el Estadio de La Ciudad de los Deportes, o quienes la siguieron por las pantallas de televisión, porque se trató de un duelo que rayó en la perfección.

Errores, aciertos de uno y otro bando dieron forma a uno de los mejores partidos de los últimos tiempos en la Liga MX, un compromiso que perdurará por muchos años en la memoria de las aficiones de ambas instituciones, y que alimenta aún más la rivalidad entre Águilas y Celestes.

Los dos equipos dejaron sobre la cancha la dignidad y grandeza, más allá de las pifias o desconcentraciones arbitrales, mismas que ocupan un espacio entre las críticas que ha generado este duelo de semifinales, pero que son parte de lo que envuelve esta rivalidad del histórico y envejecido clásico joven del futbol mexicano.

Que, si la Máquina la volvió a cruzazulear, los errores de Rotondi o la marcación del penal del silbante Adonai Escobedo, dieron al traste con la destacada temporada que hicieron, es una realidad, pero lo que no se puede echar por la borda es que este tipo de situaciones deben servir de un gran aprendizaje para el técnico Martín Anselmi.

Lo único lamentable es la actitud cobarde y llena de frustración del director deportivo de Cruz Azul, el uruguayo Iván Alonso y su compatriota Mathias Cardacio, quien funge como director de futbol del club que, junto con personal de seguridad, golpearon al reportero Édgar Malagón de Mediotiempo.

Este tipo de comportamientos terminan por ensuciar y lastimar la imagen, así como el trabajo que viene haciendo desde hace varios años el presidente del club, Víctor Velázquez, quien es captado en la sala de prensa después del partido ante América, y advierte qué hay que saber reconocer la derrota como la victoria, eso que sus colaboradores no lograron entender.

Lo dicho, esta serie de semifinales hizo rodar miles de lágrimas, unas de alegría y otras de frustración, pero en lo futbolístico ambos clubes respondieron a las expectativas que se generan cada que se enfrentan, y más si se trata en una serie definitiva como sucedió la noche del domingo.