"El aprendizaje queda y quien más aprende soy yo, me lo llevo, no voy a cometer los mismos errores si no sería poco profesional y un burro, fue un duro palazo en mi cabeza que tengo que masticar en estos momentos y ver para dónde salimos".
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El estratega argentino descartó que vaya a renunciar a pesar del momento crítico que vive el conjunto universitario que se quedó en la orilla para el presente Apertura 2022 tras caer ante el Puebla.
"Bajarse del barco lo veo como una cobardía de ir y decir 'me voy', no saco de mi cabeza volver a hacerlo, hay situaciones que la institución tiene que manejar, en su momento se hará un análisis y esa decisión será positiva o negativa sobre mi continuidad... nunca me bajé del barco, ni en lo profesional ni en lo humano, tampoco lo voy a hacer ahora, la institución me pidió ayuda en un momento difícil años atrás, hemos pasado momentos buenos y tres momentos muy malos que son tres torneos sin clasificar".
Además, Lillini señaló que, a su juicio, le faltó tener más en consciencia al conjunto universitario respecto al entorno generado en el exterior sobre las expectativas de este equipo.
"Con el correr de los partidos uno ve qué le falta de forma personal, creo que se nos hizo desde lo externo, se creó una situación que no era propia del equipo, que con este equipo debíamos arrasar, esto no es una cuestión de nombres y apellidos, si no esto sería muy fácil, no hubiésemos competido en otros torneos atrás. Quizás me faltó permear eso más al grupo, bajar los decibeles, lo que se estaba creando de que el equipo estaba para campeón por las incorporaciones, tendría que haber manejado mejor esa situación y no crear falsas expectativas".
