Mandaron silenciar a las 'bandas' previo al Súper Clásico

Los decibeles estaban por todo lo alto y el ambiente aún mejor. La explanada del estacionamiento del estadio Akron era un total fiesta que conforme se acercaba la hora del Súper Clásico crecía y crecía.

Parecía no importar lo sucedido el miércoles pasado por la Copa MX, aunque la herida aún estaba abierta... "Si se repite un partido como el del miércoles, se tiene que ir. Es un técnico de equipo chico", se escuchaba en los accesos al estadio en clara muestra de descontento por lo que José Cardozo había presentado en el duelo de Copa MX.

Sin embargo, la fiesta entre aficionados rojiblancos y azulcremas seguía en plan grande. Los fanáticos de ambos equipos llegaron desde más de tres horas antes para comenzar a cantar y bailar a ritmo de banda, fiel a lo que sucede en los partidos de la selección mexicana en los Estados Unidos.

Eran más de 20 grupos musicales los que se presentaron a lo largo del estacionamiento, en una fila sonaba una canción y metros adelante había otra. Con playeras rojiblancas y azulcremas el color estaba puesto hasta que autoridades del estadio decidieron ponerle fin, o al menos lo intentaron.

Autoridades municipales y del propio estadio Akron comenzaron a hacer un recorrido por el estacionamiento para silenciar a las bandas, en teoría, por no estar dentro del reglamento del uso del mismo y por alterar el orden. Dicha situación no fue del todo seguida por los aficionados que después de discutir algunos minutos siguieron con su plan inicial.

Así, la fiesta en el Akron no fue apagada pues ese momento fue aprovechado por algunos para ingresar al estadio y continuar el buen ambiente pero ya dentro del inmueble.