Marcelo Barovero, portero de Rayados de Monterrey, recuerda con cariño que Antonio Mohamed lo catapultó con Huracán en el 2007 y dejó en claro que ha saldado una vieja deuda que tenía con él por ese detalle en campo.
Marcelo Barovero salda una vieja deuda con Antonio Mohamed
El argentino dijo que rompieron una herencia de no ganar títulos y, aunque no era su culpa, dieron la cara y ganaron.






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“Era una deuda que tenía con Mohamed, me abrió la carrera en Argentina hace unos doce años metiéndome a jugar, y siempre imaginé darle un título; esto cierra”.
El título con Rayados quitó una presión de antaño por la sequía desde hace varios torneos. Barovero sentenció que siempre lucharía por devolver esa alegría a la gente, aunque no fuera su culpa.
“La herencia del equipo de tantos años sin salir campeón no era de muchos de nosotros, pero había que poner la cara, tener perseverancia. Como dije: mientras esté adentro la voy a luchar, cuando me vaya, no diré más nada”.
Ganar es una obligación para el arquero argentino, por ello, no quita los pies de la tierra a pesar del título; pide a sus compañeros no confiarse y poner la mira en el siguiente torneo.
“Es para lo que estamos. Más allá de la Estrella, es la alegría; después, que no nos confunda tampoco, hay que seguir trabajando. Dentro de poco hay que empezar otra vez y la presión en esta institución es muy grande por ganar”, concluyó Marcelo Barovero.




















