Martín Galván admite que "vivió en una burbuja" tras debutar a los 15 años con Cruz Azul

Vivir en una nube que pertenece a otra realidad fue lo que a Martín Galván lo hizo desencajar, luego de que debutó a los 15 años con Cruz Azul. Se convirtió en el jugador más joven del futbol mexicano en disputar un partido de primera división. De aquel momento han pasado ya 11 años, nueve meses y 12 días. Parece que todo sigue fresco e intacto.

El recuerdo se mantiene en la mente de Galván, quien no logró consolidarse en el máximo circuito, situación que, a su consideración, "por algo pasó... para que me diera cuenta de muchas cosas (...) Eres una persona inmadura, que no se da cuenta de las cosas realmente que valen. Por esa parte es complicado; te creas una imagen de las cosas que no es la real, que está fuera de contexto. Eso te hace crecer de una forma que está mal".

Sin embargo, eso le sirvió para madurar y ser ahora un jugador más pleno. "Estoy contento de lo que viví en esos tiempos", aseguró en charla exclusiva con TUDN.

Para muchos jóvenes, debutar en primera división a los 15 es un sueño. Para Galván también lo fue, aunque el despertar fue lo que lo hizo poner los pies en la tierra, pues supo que la vida real era diferente a lo que él vivía en aquel momento. Incluso, su familia también cruzó tal camino.

"Nadie está preparado para esas cosas y más cuando uno viene de no ser nada. Es complicado, porque nadie te da una guía para decirte cómo va a ser el proceso. A mi familia también le sirvió todo lo que pasamos y hoy en día todo es diferente".

Después de su breve paso por Cruz Azul, Martín Galván bajo al Ascenso, con Correcaminos y Atlante. La Segunda División también la pisó; Reynosa y Pioneros fueron sus refugios, mismos que le abrieron los ojos.

"De estar acostumbrado a que en Cruz Azul te dan todo y es un club importante e histórico, es una nube que no es la realidad. Yo no había vivido ese proceso y luego lo viví, porque te das cuenta que no tienes nada. En segunda yo pasaba desapercibido y realmente no pasaba nada, solo el tiempo. Yo estaba en una desesperación de pensar qué iba a pasar conmigo".

Después, como lo narró el mismo Galván, "surgió lo de España (Salamanca) que me salvó totalmente, porque me ayudó a creer en esto en el futbol, porque si no, no sé si estaría jugando ahora futbol".

Ahora, Galván, con 27 años de edad, tiene la oportunidad de volver a brillar con luz propia en la Liga MX. Bravos de Ciudad Juárez es el equipo que le abrió las puertas y que lo tiene en el máximo circuito. El resto depende de él.