¡Desastre rojiblanco! Pachuca remontó a Chivas y… viene el clásico

Chivas fue borrado por el Pachuca en los últimos minutos y el clásico está a la vuelta de la esquina. El Guadalajara vive, otra vez, una crisis después de ser derrotado 2-4 por los Tuzos que apretaron el acelerador en los últimos minutos y se llevaron todo el botín.

Pese a los buenos momentos que tiene Chivas en el partido, el desequilibrio mental es claro, pues más allá de la remontada que tuvieron, después vinieron los feos errores defensivos y con ellos la debacle que tiene Tomás Boy con un pié fuera.

Los primeros minutos fueron de total análisis por parte de ambos equipos. Chivas intentaba y Pachuca aguardaba al error sabedor de la endeble defensiva del local.

No fue la defensiva pero sí el mediocampo rojiblanco el que falló. Dieter Villalpando perdió la pelota y dejó servido el contragolpe que Jara comandó y que terminó con falta de ‘Pollo’ Briseño dentro del área para que el árbitro no dudara en señalar el penal.

El histórico goleador de los Tuzos definió bien desde los 11 pasos y le dio la ventaja a la visita.

El 7 de las Chivas salió de gran forma con el balón pegado a la banda, metió un centro raso que Rey no supo rechazar y dejó servido para que ‘Cone’ Brizuela simplemente la empujara.

Llegó el segundo tiempo y Chivas era mucho mejor, tanto que pronto consiguió el gol de la remontada con un gran remate de cabeza de Alan Pulido tras centro de ‘Chofis’ López.

Fue entonces cuando todo se desmoronó para el Rebaño de Tomás Boy.

Con la ventaja, Chivas se tiró atrás, regaló la pelota y vinieron los feos errores defensivos. ‘Pocho’ Guzmán le ganó la espalda a ‘Chapo’ Sánchez y remató pleno para poner el empate. El canterano lo gritó con todo a la afición.

Entonces llegó el nerviosismo y con ello, el desastre. ‘Chapo’ Sánchez la retrasó de pésima forma para Sepúlveda, quien se tropezó y dejó a Jara solo frente a Gudiño para que lo fusilara a placer.

Todavía Cardona se dio el lujo de poner el cuarto gol tras un feo error de Gudiño y de esa forma sentenció el triunfo de los Tuzos y la debacle de Chivas.