Hace tres décadas, Jaime Ordiales Domínguez se fue de Cruz Azul, era su tercer club como jugador, ahora el destino lo pone de vuelta en los campos de La Noria, pero en un puesto clave, como director deportivo labor que ha desempañado en otras instituciones, entre ellas el América y el Guadalajara.
Paco Arredondo | Regresa 30 años después a Cruz Azul
Uno de los periodistas más importantes y experimentados de México nos lleva por un recorrido histórico.
Ordiales Domínguez sin moverse más de lo necesario, y menos porque hasta hace unas semanas tenía empleo en Gallos Blancos de Querétaro, paso por encima de todos aquellos candidatos mediáticos, que, desde la salida de Ricardo Peláez Linares, se colocaron para manejar los destinos celestes.
Jaime estaba a la expectativa de cuál sería su destino con los queretanos, luego de la venta del equipo a Grupo Caliente, pero en ese periodo se topó con una nueva oportunidad, esa a la que difícilmente se le puede decir que no, y máxime porque se trata, si de un de las instituciones más golpadas emocionalmente hablando, pero que también requiere de una reingeniería.
El nuevo director deportivo de Cruz Azul, si algo tiene es una piel curtida para estos menesteres, está preparado en todos los aspectos para realizar sus funciones, y en comparación de su anterior club, ahora sí tendrá un presupuesto más acorde para echar andar sus ideas, pero también sabe, cómo convencer a sus jefes con argumentos sólidos.
Los azules están cumpliendo 22 años sin ganar un título de liga, y como ha sucedido desde entonces se vuelven a reactivar las ilusiones para terminar con esa sequía, y ahora todo está en manos de un tipo de futbol, uno de esos personajes con los blasones para luchar por cada uno de los objetivos, pero que sabe por dónde se puede y debe caminar.
Pensar o anhelar la novena estrella para los capitalinos se vale, pero es más valido comenzar a dar esos pasos firmes que requiere esta tarea, Jaime Ordiales Domínguez, quizá no sea alguien que le guste estar siempre frente a los reflectores, pero si un directivo que de manera silenciosa trabaja y se dedica a dar lo mejor en pro del club que contrata sus servicios.